viernes, 2 de abril de 2021

COSTA DE LUGO: DESDE RIBADEO HASTA LA PLAYA DE LAS CATEDRALES

Llega la semana santa, vale que este año, al igual que el anterior, es un poco mierda porque no podemos ir donde nos de la gana, pero bueno hay que amoldarse y pensar que esto pasará algún día. El caso es que el jueves y viernes es fiesta, el lunes siguiente también, al menos en Euskadi. así que si cojo fiesta en el curro el lunes, martes y miércoles me junto con bastantes días, y si encima le sumo que el viernes 26 también tengo fiesta, al final me junto con 11 días. Ahora ya solo falta pensar a donde ir. Quedarme en el País Vasco durante 11 días es un rollo, son muchos días como para no hacer km, quiero hacer un viaje largo a la rojita.


Al único sitio donde podría ir legalmente es a Galicia ya que estoy empadronado en Coruña, de echo lo peligroso es andar por Euskadi ya que mi DNI es de Coruña. Cuando ando por Euskadi llevo el justificante de la empresa donde trabajo y una factura demostrando que tengo vivienda en Euskadi pero en donde no estoy empadronado. Allí en Galicia puedo andar libremente sin justificante, el problema es llegar hasta allí. Ya a primeros de mes fui a Coruña y justo al entrar en Galicia me paró la Guardia Civil. Al señor agente no le hizo mucha gracia mi viaje, el decirle que trabajaba en Euskadi y que volvía a mi casa en Coruña, el trato la verdad es que no fue muy correcto, pero yo calladito que tenía más de perder que de ganar. Espero que esta vez no me paren, y si me paran que no sea el mismo "amable" agente.

Una vez entre en Galicia ya podré moverme libremente por la comunidad sin miedo, así que en lugar de ir para Coruña me quedaré unos días recorriendo la costa de Lugo. Parte la conozco pero no toda, además fue sin furgo y me apetece hacer un viaje para dar a conocer un poco esa zona. Además está la playa de las Catedrales que sin duda para los que no conozcáis el lugar os va a encantar. Yo cuando estuve hace ya bastantes años no fui solo y encima estaba abarrotado de gente, no tengo muy buen recuerdo. Además tuve follón con un gilipollas que pensaba que era el más listo del parking y al final todo te chafa un poco el día. Esta vez yendo solo sin duda voy a estar más relajado, o eso espero.


Viernes 26 de Marzo del 2021

Termino de trabajar a las 6 de la mañana, una duchita y arranco la rojita. Todo el mundo dice que estar toda la noche trabajando y hacer un viaje largo del tirón es una locura. Yo creo que locura es hacer otras cosas, la gente no entiende que llevo la casa encima, si me entra sueño pues me paro y a dormir, así de simple. Voy solo, no tengo horario ni nadie que me meta prisa, si tengo sueño no tengo porque aguantar, paro y listo. Aunque no se yo si me paro por ahí a dormir y me piden el DNI me pueden denunciar. De todos modos voy hacia Ribadeo, el GPS me marca 4 horas y media, joder eso no es un viaje largo, es un paseo. Vamos para allí.

El viaje me lo tomo con calma, ahora me ha dado por poner el limitador a 125 para ir siempre a 120 reales. Voy a gusto a esa velocidad, y como no hay mucho tráfico, no hay problema del que te adelanta para ponerse delante más despacio. Hombre siempre hay algún idiota pero uno suspira e intenta pasar de este tipo de gente.

También intento pasar de otras camper que por el echo de llevar techo elevable y toldo como yo, parece que te tienen que adelantar e ir ellos primero. El otro día pille a una autocaravana que iba mucho más despacio, cuando me puse a adelantar vi que a la velocidad a la que iba no podía adelantar, el tío me estaba apretando. Era un matrimonio de jubilados con ganas de marcha, para que luego digan de los jóvenes. Si ellos van a 100, ¿por que tienen que acelerar y ponerse a 120 cuando los estoy adelantando? Cuando terminé de adelantarles me volví a poner a 120 y se fue quedando atrás. Jamás entenderé la gente que va buscando bronca. Yo soy demasiado feliz como para que un imbécil de estos me amargue el día. Algunas veces caigo en la trampa pero cada vez menos. Perdón por contar siempre las mismas batallitas, creo que me empiezo a repetir demasiado.

Llego al Puente de los Santos, puente que une Asturias con Galicia. Fue aquí donde hace tres semanas me pararon, esta vez no están. Unos minutos antes de las 11 llego a mi destino, el faro de Isla Pancha en Ribadeo, es el primer faro que espero visitar recorriendo la costa de Lugo. Una ruta que espero hacer en diferentes viajes ya que en este no me va a dar tiempo. Aparco la furgo en el sitio desde donde se tienen las mejores vistas, tanto del faro como del mar, el lugar es espectacular, no hay nadie, solo gente que viene de paseo y al llegar se da la vuelta. Encima el día es impresionante, cielo azul y temperatura buenísima. Imagino que luego por la tarde vendrá gente, ahora toca disfrutar en soledad.

Me bajo de la rojita para ir a poner los calzos y llegan cuatro coches, no uno, cuatro. Son todos modelos seat león, chavales jóvenes que aparcan sus coches juntitos en plan pose. Ya empezamos, pero si todavía no me he bajado casi ni de la furgo. Es una falsa alarma, han venido solo a hacer una foto a los cuatro coches con las bonitas vistas de fondo. Hecha la foto se marchan, gracias señor.

Calzo la furgo y disfruto del lugar, es una pasada estar aquí.





Entre que llevo toda la noche sin dormir, que me he tomado dos birras, y el solazo que hace, me está entrando sueño. Hay que moverse y hacer un reconocimiento de la zona. Delante de donde he aparcado hay un pequeño parking, unos metros antes de llegar hasta aquí hay otro parking. Los dos son geniales para pernoctar pero no tienen las vistas que tengo yo. Por internet he leído que no hay problema en pernoctar aquí, imagino que en la zona de tierra donde yo he aparcado tampoco lo hay.

En un pequeño alto hay una especie de estructura de madera que tiene pinta de mirador, hay gente así que ya subiré en otro momento cuando no haya nadie. Me meto por un sendero para acercarme al lado de la costa que no veo desde la furgo. El sendero va recorriendo la costa, la distancia es corta pero merece la pena por las bonitas vistas que hay también por aquí. 

El mar está en calma y una chica sentada en la orilla del prado observa pensativa hacia el mar. Espero que sus pensamientos sean positivos y no negativos, nunca se sabe. Hay gente que se acerca a visitar el mar, ver la luna, o simplemente el horizonte, cuando se encuentra triste o deprimido. Creo que estas cosas hay que hacerlas cuando se esta bien. Valorar el mar que tenemos delante, esa preciosa luna que nos ilumina cada noche, estas montañas lejanas a las que hay que llegar porque seguro que de cerca son mas bonitas. No se, hay que valorar las cosas cuando se está bien, no cuando estamos mal. Vale vale, me cayo. 






Dejo a la chica tranquila pasando a bastante distancia de ella para no incomodarla y llego a la zona de las mesas. Este puede ser un buen sitio para venir a comer, lo malo es que igual queda a bastante distancia como para andar trayendo la comida desde la furgo. Desde la zona del merendero hay unas escaleras que bajan a una playa. Hay un precinto que impide bajar, no entiendo el motivo porque parece estar todo en muy buenas condiciones, quizás el último tramo de escaleras esté en mal estado. Imagino que si lo han cerrado será por algo.

Vuelvo hacia el merendero y por un paseo adoquinado sigo hacia la carretera que lleva al faro y donde se encuentra el primer parking. Aquí ya empieza a haber coches aparcados. 





Paso de largo la rojita y bajo por la carretera que lleva al faro, la puerta de acceso está cerrada, al parecer es una especie de apartamento turístico. He visto varias veces entrar y salir a un audi enorme, por cierto ha pasado a toda velocidad, debe ser el dueño porque se le ve entrar y salir muy animoso, otro que se cree el dueño de la zona. Una pena no poder acercarse más al faro, se ve super chulo, aunque estas cosas se ven más bonitas desde lejos.

Echo un vistazo a la rojita, no me digáis que no es impresionante el lugar, flipo donde he aparcado, pero me sigue dando un poco de pánico como se pondrá el lugar cuando venga toda la gente. 



En vista que no se puede pasar, vuelvo para arriba. En la cuesta que baja al faro hay una curva que tiene pinta de ser también un buen sitio, además aquí no podría aparcarme nadie al lado. ¿Bajo la rojita aquí?. Es que me raya un poco que si ahora un viernes al medio día está viniendo bastante gente paseando, miedo me da el finde. Además siendo semana santa igual vienen muchas furgos, quizás me esté preocupando sin motivo pero los que vengan van a querer ponerse justo donde estoy yo y me voy a mosquear con la gente pegada. Donde he aparcado es prácticamente al final de la carretera que lleva al faro, solo quedan unos metros para la puerta. Si aparco ahí si que estaría solo. Venga pues voy a bajar la furgo.

Aparco la furgo en este nuevo lugar, calzo la furgo e incluso levanto el techo casi para obligarme a no moverme de aquí. En mi cabeza pintaba mejor, aquí la furgo a parte de dar bastante el cante, las vistas no son las mismas que desde arriba. Venga Baxa déjate de ostias y estate quieto.


No termino de estar a gusto aquí, jo que rollo. ¿Me estaré convirtiendo en un viejo maniático? Me siento un poco fuera de lugar aquí aparcado. Otra vez a bajar el techo y me vuelvo para arriba, me merezco que haya aparcado alguien y me haya quitado el sitio. 

Me acerco al parking que está al lado de las mesas. Está muy chulo, pero si no existiera el otro, con las vistas que tengo allí es ridículo ponerme aquí. Lo que me echa del otro parking es que es tan bueno que fijo que la gente se acerca también a mirar desde esa esquina, se nota en el suelo como está comida la hierba de pasar la gente. Bueno pues es lo que hay, no me voy a privar de un sitio así por que venga la gente. 

De nuevo para allí, juro que no te muevo más de aquí. Vuelvo a mirar el lugar, la verdad es que es una puta pasada, espero poder disfrutarlo tranquilo.

No hay nadie en el mirador, así que voy para arriba. El cielo está empezando a nublarse. En el tiempo pone que por la tarde se pondrá peor pero apenas caerá alguna gota y enseguida por la noche se volverá a despejar.

Junto al mirador de madera hay un banco para sentarse mirando al mar, excelente sitio para leer un rato, pero en vista de las procesiones de gente que estoy viendo pasar por aquí, tranquilidad cero en la lectura. Además si me pongo aquí toda la tarde a leer, sería ser un poco egoísta al no dejar a los que vengan disfrutar sentarse durante un rato en este lugar. 



He elegido el mejor momento para subir al mirador, un barco se va acercando hacia el puerto de Ribadeo, no pensaba que pudieran entrar barcos tan grandes a ese puerto. He estado viendo como llegaba el barco desde lo lejos, y ahora me quedo viéndolo marchar. Tiene que ser una vida dura la de marinero, tanto tiempo fuera de casa, encima en alta mar con el peligro que tendrá, rodeado de un montón de tíos. No me va nada ese plan. 

Yo he sido camionero y me he pasado bastante tiempo fuera de casa, pero estaba solo y no tenía que aguantar a nadie. Bueno si tenía que aguantar, era lo que peor llevaba, cuando iba a cargar o descargar. Es una pasada la de gente estúpida que hay, algunos incluso te dejaban caer que si no les pagabas no te cargaban o descargaban, jamás pague a nadie, me niego. Yo estaba ahí para ganar dinero, no para dárselo a un miserable que luego al acabar se iría a su casa y yo me quedaría por ahí tirado con el camión buscando donde dormir sin pasarme de horas. Una mierda de curro vamos. Me gusta la carretera, mucho, pero en el plan que voy ahora. Hacer km, parar donde me de la gana, pasar tiempo fuera de casa, pero sin estar pendiente ni de horarios ni de idiotas cargadores. Yo he cargado y descargado muchos camiones, he trabajado también de eso, y jamás se me ocurrió pedir a nadie dinero. Otra batallita, joe. 


Vuelvo a la rojita y como hace un poco de fresquito me meto dentro a ver un rato la tele. Oigo un motor, alguien está aparcando al lado, miro y se quien es.

El otro día recibí un mensaje en mi Instagram @mis_viajes_con_la_rojita, de un chico que se había comprado una Vw California. En el mensaje añadía fotos de una preciosa T6.1 roja. Impresionante de guapa, pero lo que más ilusión me hizo fue cuando me dijo que se la había comprado roja por la mía, joe que fuerte. Estuvimos hablando un rato y me comentó que si algún día pasaba por Ribadeo que le avisara. Joder, si en apenas unos días yo venía para aquí, se lo tenía que decir. Ya sabéis que no soy yo muy de quedar con gente, pero alguien que se compra su furgo y la elige roja en honor a mi rojita sin duda se merece un trato especial. Cuando he llegado antes no le he querido avisar, más que nada por no ponerle en un compromiso. Al ver mis fotos aquí si quería visitarme ya sabría que estaba por aquí y así tendría libertad de venir o no.

Me bajo de la furgo para ir a saludarle, enseguida me cae genial, se le ve un gran tipo. Me gusta su historia de como ha querido siempre su California y por fin la ha conseguido, como me suena todo lo que me dice. Me hace mucha ilusión ver las dos rojitas juntas. Espero que Javi disfrute junto a su familia durante muchos años su furgo, que buen gusto ha tenido al pillarla roja. 


Javi se tiene marchar a su trabajo y yo me vuelvo a meter en la furgo. El cielo cada vez está más negro, incluso ahora más que antes. No se si es tormenta o que, pero no tiene pinta de caer solo cuatro gotas, si cae será mucho.

Empieza a llover, bastante fuerte por cierto, para colmo también sopla muy fuerte el viento. Menos mal que son muchos temporales ya dentro de la rojita, las primeras veces me acojonaba mucho que entrara el agua o que me volcara la furgo el puto aire. Ni loco me habría puesto aquí tan cerca del acantilado con este aire cuando era novato.

Pasa el tiempo y sigue lloviendo bastante, me entretengo viendo a los coches que llegan, son parejas que se quedan dentro de sus coches, lo curioso es que llegan otros coches, también con parejas y aparcan juntos unos de otros. ¿Será un parking de intercambio de parejas? Hombre también puede ser que al llover tanto la gente venga y están esperando dentro a que pare. Pero lo que me choca es que aparquen tan juntos unos de otros. El caso es que al final no he visto a nadie cambiarse de un coche a otro, pero he pasado un rato entretenido. 


Deja de llover, deja de soplar y los rayos de luz empiezan a atravesar las nubes. Es lo mejor de la tormenta, cuando termina y parece que todo retoma la normalidad, incluso los pájaros callados empiezan a piar. El suelo se va secando rápido y yo salgo de la rojita a disfrutar de este bonito momento.

Me acerco al paseo que di por la mañana para ver como está el mar, sigue tranquilo, aunque suena mucho, y con el silencio que hay en la zona parece sonar el doble.

A parte de las parejitas, no ha venido ninguna furgo en toda la tarde, ya casi está oscureciendo por lo que igual tengo la suerte de dormir solito, sería genial dormir solo en un lugar tan mágico como este. 




Como he estado bastante rato dentro de la furgo, me apetece salir a dar una vuelta. Voy por el paseo que va desde el faro hasta Ribadeo. No tengo intención de llegar hasta el pueblo, pero si al menos dar una pequeña vuelta y ver por donde se llega. El paseo es chulísimo y las vistas impresionantes, como todo por aquí, mire donde mire es super bonito. Sin duda he elegido bien viniendo aquí.

No ando mucho cuando veo que el sol empieza a ocultarse, he leído que la puesta de sol es muy bonita desde el faro, así que me doy la vuelta para ir a verla. El primer parking, el que esta antes del faro, está completamente vació, donde está la rojita también está vacío. Imagino que ya a partir de esta hora no vendrá nadie por aquí y voy a poder estar tranquilo. Me encanta. 



Llego a la rojita y me pongo a disfrutar de la puesta de sol, que gozada que se haya despejado y pueda ver el sol ocultarse, sin duda es una escena preciosa. Oigo un motor, vaya hombre, demasiado perfecto era todo. Se acerca un coche, una chica sola aparece con una pedazo cámara de fotos. Ha aparcado al lado de la rojita y sube al mirador a hacer fotos del faro y de la puesta de sol.

Oigo otro motor, joder. No es un coche, ni dos, tres coches llegan seguidos. Aparcan y se ponen a disfrutar de la puesta de sol. Sin duda merece la pena venir a esta hora porque el espectáculo es una pasada. Siendo ya tarde no pensaba que fuera a venir nadie pero bueno, estos se irán tarde o temprano. En cuanto el sol termine de ocultarse me volveré a quedar solo. 



Me meto en la rojita, el día me ha cundido bastante. En si no he hecho nada, pero teniendo en cuenta que hoy lo tenía que haber pasado durmiendo, bastantes cosas he hecho.

Los coches se marchan y me quedo solito bajo las estrellas con este cielo ya negro de la noche. Me encanta este momento. De verdad que no entiendo a la gente que busca otras furgos para quedarse a dormir en un sitio, pero si solo se está cojonudo.

Oigo otro motor, será alguna parejita que viene a darse amor. Aunque son más de las 22 horas, se supone que no se puede andar por la calle a esta hora. ¿Será la guardia civil? Miro por la ventana y es una camper, vaya por dios, se me jodió lo de dormir solo. Al menos se han puesto separados. No dan muchas vueltas para decidirse donde aparcar, y enseguida apagan las luces y el motor.


Ahora si que ya me meto dentro venga quien venga, total ya me da igual, solo ya no voy a dormir. En cuanto se ha ocultado el sol se nota como ha refrescado la temperatura y pongo la calefacción. Me meto en la camita y a dormir. Se nota que no he dormido esta noche pasada y me quedo frito enseguida.


Sábado 27 de Marzo del 2021

Unos minutos antes de las 8 de la mañana me despierto, ostras que tarde es, he dormido 9 horas. Ya es de día, me he perdido la salida del sol, me caguen to. Salgo enseguida de la furgo, hace bastante fresco, y más estando en pijama. Aunque no he visto salir el sol la estampa que tengo ante mi es maravillosa. Justo detrás de la rojita, el sol, y a un lado el maravilloso faro. 



Los de la camper que llegaron anoche es una gran volumen de alquiler, la empresa pone que es de Vigo, se han venido a la otra punta de Galicia, otros con ganas de hacer kilómetros. Siguen durmiendo, se están perdiendo este precioso amanecer.

Preparando la mochila para la ruta que voy a hacer, veo como llega un tío. No sería nada extraño si no fuera por los cartones que lleva en la mano, tiene toda la pinta de haber dormido por ahí en la calle.

Disimulo como que sigo preparando la mochila pero lo que hago es ver a donde va. Sube al mirador y se pone a estirar los brazos. Imagino que el pavo está entrando en trance o alguna historia rara. Pasados unos minutos se marcha con las pilas cargadas. Oye cada uno es feliz a su manera.

Dejo la rojita y a los dormilones de la furgo de alquiler y emprendo mi ruta por la costa de Lugo, hoy el objetivo es llegar hasta Rinlo.



Al llegar al primer parking me encuentro con la primera señal que indica hacia donde tengo que ir. Ayer por la tarde cuando fui a dar el paseo ya me fijé en esta señal para ahora no tener que andar buscando por donde ir. Marca hasta Rinlo 9,2 km, así que tengo buena tirada.

La ruta en si es por la costa pero las señales me van guiando hacia el interior en lugar de hacia la costa. Lo bueno es que son enormes campos verdes muy bonitos, y que en cada cruce tengo una señal de hacia donde tengo que ir. A ver si aprende el alcalde de Oyón, que madre mía que mal señalizado estaba todo allí.

Empiezo a ir por un camino asfaltado que va paralelo al mar, a lo lejos veo una señal, entro en una zona de hierba que ahora ya si me lleva directo al mar y donde ahora si verdaderamente comienzo mi ruta. 




La ruta que estoy haciendo se llama “Camino natural de la ruta del Cantábrico”, el camino de hierba que va al lado del mar es precioso, pedazo vistas tengo todo el rato. Además voy con la tranquilidad de que está todo super bien indicado y a cada poco hay una señal indicando los km de la ruta.

Podría poner un montón de fotos pero un compañero de trabajo me dijo que le gustaba mucho el blog, pero que pongo demasiadas fotos que no aportan nada y se le hacía pesado. Yo le agradecí el comentario pero en el blog pongo un cuarto de todas las fotos que hago, pero bueno, intentaré poner menos. Es que como todo es tan bonito, me cuesta no ponerlas.





Veo una autocaravana en un acantilado, vaya sitio más guapo donde han aparcado estos. Además aquí de noche sin farolas habrán estado de lujo pudiendo ver las estrellas.

Cuando llego el sitio me parece todavía más chulo. Hay mesas donde poder comer, incluso un contenedor. Siento un poco de envidia, aunque no me puedo quejar de donde estoy yo, seguramente si ellos ven mi rojita, pensarán lo mismo al verla en donde está.

Sería un buen lugar para desayunar pero todavía no tengo hambre, así que continuo la caminata sin dejar de ver en todo momento la costa. Llevo ya un buen rato y no me canso de ver las cuevas y las olas golpeando continuamente la costa. Ains si vale, pondré menos fotos. 







Voy tan agusto oliendo el salitre del mar, y oyendo como rompen las olas, que ni se me pasa por la cabeza ponerme los cascos, quiero ir con todos mis sentidos disfrutando del lugar.

Veo a lo lejos unas casas entre la maleza, tienen toda la pinta de estar abandonadas. ¿Me acerco?

Sin salirme del camino, cuando llego a la altura de las casas veo que son solo unas casas a medio hacer. Alguno que se quedó sin dinero a medio hacer la casa de sus sueños. Va, para eso no me acerco, no tiene nada especial. Prefiero seguir la ruta que es a lo que he venido y todavía me quedan km.

Sigo sin tener hambre, pero no lo voy a dejar más tarde que si no se me junta con la comida. Me siento en unas piedras al borde del acantilado y a disfrutar de un bizcocho que me preparó mi madre. Si es que tengo la mejor madre, me hizo una empanada y un bizcocho, es una santa, y la mejor cocinera del mundo. 




No me termino el bizcocho, ya lo dejaré para más adelante, no tengo hambre y si muchas ganas de seguir andando y haciendo fotos, muchas fotos. Luego cuando las paso al ordenador suelo borrar bastantes porque a veces hago algunas muy parecidas. Más vale que sobren a que falten, pero me ha pasado el caso de hacer alguna foto, y al no revisarla, luego darme cuenta que estaba movida. Ahora suelo verlas al momento, pero nunca se sabe.

Algunos tramos de la costa me recuerdan mucho a Normandía. Los acantilados son muy parecidos y me hace volver a las historias de los aliados escalando los acantilados para llegar hasta los nazis. 




Veo a lo lejos una iglesia que sobresale entre los tejados de las casas, debe ser Rinlo. Es el primer núcleo urbano que he visto desde que salí del faro, todo lo demás que he visto eran pequeños grupos de casas, pero no pueblos.

El camino empieza a alejarse de la costa, jo no quiero. Voy dejando el mar a mi espalda y llego a una carretera asfaltada en la que una señal indica 1,2 km hacia Rinlo. Que poquito me queda para llegar, se me ha hecho muy corto hasta aquí.

Yendo por la carretera, menos mal que no hay tráfico, empiezo a oír un sonido muy fuerte sobre mi cabeza. Parece un moscón enorme, pero eso no es una mosca, tiene más pinta de un dron. No me jodas que alguien está aquí con un dron en lugar de estar en los acantilados. El sol no me deja ver bien pero al final lo localizo, tampoco es un dron, es un avión. Ostia que caña, si parece de verdad. Al que no encuentro es a la persona que lo está manejando, que bien vuela el avión, lo hace super bien de un lado a otro como si aterrizara y despegara. Aunque yo sigo sin encontrar a quien lo está dirigiendo, creo que él si me ha visto a mi, porque empieza a hacer figuras y adornos, será chulo el tío. Al ver que tiene público se ha venido arriba.

Voy a seguir la ruta que todavía me cae el avioncito en la cabeza y seguro que me echa la culpa a mi. Aunque solo marca un km hasta Rinlo, al ver la recta que tengo hasta allí me parece como si faltara mucha más. Que corto se me han hecho estos 8 km recorriendo la costa, y este último km se me va a hacer eterno. 


Todavía no he llegado a Rinlo cuando veo un panel informativo. Me acerco a leerlo, está en gallego, nada de castellano. Esto me toca los huevos cantidad, pero vamos a ver. Por lo general los que vengan de turismo por aquí será gente de fuera de Galicia, coño pues ponerlo en castellano también. Vas a Valencia igual, todo en valenciano, en Cataluña en catalán, pero luego vas al País Vasco y todo está en euskera y castellano, que es como debe ser. Y ya cuando vas a un sitio y está en el idioma de la comunidad autónoma y en ingles, pero nada de castellano, ya es cuando me dan ganas de quemar el puto panel. Puto país de paletos. Menos mal que tampoco hay que ser un lince para entender el gallego y según dice el panel hay un agujero a escasos metros. Vamos a ver el agujerito.

Al llegar solo veo un grupo de zarzas, ni agujero ni ostias. Hay un panel al lado de las zarzas donde hay una foto que se ve el agujero desde el aire donde si se ve chulo, pero a pie de tierra a penas se ve nada. Una mierda vamos, encima muy mal cuidado con los hierbajos. 

Un tramo de barandilla está roto así que me meto, miedo me da que venga un niño por aquí, se puede ir directo al agujero. Me salgo porque lo veo muy peligroso y apenas se sigue sin ver nada. 




Regreso a la carretera asfaltada para seguir hacia Rinlo. De nuevo me encuentro otra señal, está visto que no llego al pueblo. En la señal indica que por ese sendero que va hacia el mar se llega también a Rinlo. Ni me lo pienso, mejor será llegar al pueblo por la costa que no por la carretera asfaltada.

Llego a un merendero, el sitio está brutal, barbacoas, mesas, contenedor, y unas vistas impresionantes del mar. El parking es solo para 4 vehículos pero no hay nadie, tiene pinta de ser una zona muy tranquila. Joder aquí con la furgo habría estado genial, me encanta el sitio y el silencio que hay.

Hay una edificación al lado del mar. Me acerco y es un antiguo lavadero. Joder este lugar me va gustando más por momentos. 





Disfruto un rato del lugar y sigo el sendero. Una señal indica que este lugar tan estupendo es un área recreativa llamada “Campo do Cristo”. Si venís por la zona no dudéis en venir aquí, está chulísimo. El acceso además desde la carretera es muy sencillo, estrecho pero apenas son unos metros. Una autocaravana pasa sin problema.

El área recreativa está ya en el mismo Rinlo. La primera casa que me encuentro yendo por el sendero es una casita muy vieja pero ubicada en un lugar privilegiado. Desde aquí, el sendero se convierte en un paseo adoquinado que va bordeando el pueblo. Que paseo más bonito, un pueblo que se ve que es pequeño pero que bonito y bien cuidado está todo. 





A pesar de que voy super agusto bordeando la costa, me meto por un callejón para visitar un poco el pueblo por dentro. Desde la movida del covid me da un poco de apuro visitar los pueblos. No tengo yo muy claro que a la gente le haga mucha gracia ver a gente de fuera. Me cruzo con varias personas y todos muy amables me saludan, no veo ninguna mala cara, pero yo sigo sintiendo cierto apuro. De echo en algunos momentos tapo un poco la cámara para que no se note tanto que soy turista.

Recorriendo el pueblo me sorprende la cantidad de restaurantes que hay, no pensaba que fuera tan turístico, de todos modos solo veo gente haciendo recados o barriendo la puerta de su casa, turistas ni uno.




Vuelvo hacia el paseo que me lleva al puerto, es muy pequeño y no veo ni barcos. La idea es que mañana iré a visitar Ribadeo y hacer una ruta por la ría, pero pasado mañana aparcaré en el parking de la playa de Las Catedrales y vendré andando hasta aquí. Así iré recorriendo toda la costa de Lugo andando. A mi me parece muy buen plan.

Regreso hacia el pueblo y de nuevo comienzo callejear. Me dirijo hacia la iglesia que desde lejos tenía muy buena pinta, me recuerda mucho a las iglesias francesas. Estando delante de la iglesia intentando buscar un ángulo donde pueda evitar los cables de la luz para que no salgan en la foto. Llega un coche, el hombre me saluda con una sonrisa y entra en la iglesia. Debe ser el cura porque ha abierto con llave.




Para llegar hasta la iglesia he ido a las afueras del pueblo, me da rabia que siendo tan chula no consiga hacer una foto a mi gusto. Además al llegar el cura me ha cortado un poco el rollo. 

Vuelvo a adentrarme en el pueblo para poco a poco ir volviendo hacia Ribadeo. Siguiendo el maps cruzo una plaza que parece de los pitufos, completamente azul. Original es un rato la verdad, parece una fuente que la han vaciado.

Voy todo el rato dejando la iglesia a mi derecha. Un hombre está arando una finca, ni se incorpora al verme haciendo fotos, sea lo que sea que está cultivando es mas importante. Tiene que ser chulo lo de cultivar tu mismo tus lechugas o tomates. Aunque dará un curro de cojones. Casi mejor ir a comprarlos a la frutería.

Llegando a las últimas casas del pueblo para comenzar la recta que antes se me iba a hacer eterna, un perro enorme me observa sin ladrar. Estos son los peligroso, los que no se molestan en ladrar, solo te comen entero si te metes con ellos. Yo no tengo intención de molestarte así que no debería haber problema. De todos modos agradezco la valla que le impide salir. 




Ahora la vuelta, en lugar de ir por la ruta de la costa iré por la carretera asfaltada, se va muy tranquilo ya que pasa un coche cada mucho tiempo, y es bastante más corto, por aquí son 4 km menos.

Cuando llego a la altura del avioncito, veo que ahora en lugar de un avión de viajeros está volando un avión antiguo. Imagino que ha invertido muchas horas en saber volar así, me sigue flipando lo bien que lo hace. Lo sube muy arriba y luego como que apaga el motor y el avión cae en picado, poco antes de tocar tierra le da marcha y vuelve para arriba. Es un autentico espectáculo verle volar.

Otra cosa que también me sorprende es que llego muy pronto a las casas en ruinas que vi antes desde el sendero. Por la costa son 9 km, por aquí 5, vale que es casi la mitad, pero llegar tan pronto aquí me jode un poco. Es raro que se me haga tan corta la vuelta, por lo general ya voy cansado y pensando en las birras que me voy a tomar al llegar a la rojita. 

La carretera pasa muy cerca de las casas, así que ahora no hay excusa para acercarme. En cuanto estoy a pocos metros veo que no son unas casas que se hayan quedado a medio hacer, son baños públicos que los han destrozado. Vale que no le encuentro mucha lógica unos baños públicos aquí en mitad de la nada, pero coño no los destrocemos. ¿Seguro que el virus no somos nosotros mismos que lo rompemos todo?




Llego al faro cuando son casi las 12:30, el primer parking está a tope de coches, en la zona donde está la rojita no hay tantos vehículos. Imagino que la gente pensando que donde el faro estará a tope, aparcan en el primer parking. El caso es que cuantos menos lleguen hasta el faro, para mi mejor. Lo malo es que aunque no vayan con el coche, si van andando. Es normal, el faro es el protagonista de la zona.

En donde está el merendero hay bastante gente con bolsas, imagino que vienen a comer, es un buen lugar para hacerlo, y más con el día que hace.

La gran volumen de alquiler que llegó anoche se ha marchado ya. Poco han disfrutado del lugar. Me hago un vermut en la rojita y llega otra gran volumen de alquiler. Visitan el faro y se marchan. Yo cojo la cámara y voy a ver como rompen las olas. Hay una pareja de enamorados mirando al mar, así que me pongo bastante separado de ellos. De reojo los pillo varias veces mirándome, creo que les molesta un poco mi presencia. Les entiendo porque a mi también me molesta la gente en km a la redonda, pero vamos que me he puesto lo suficientemente separado como para que puedan hacer sus cosas sin yo verles.

Es un espectáculo ver como rompen las olas, algunas incluso parece que al agua me va a caer encima. La pareja se ponen también a hacer fotos. Ya tendrán tiempo más tarde para jugar a los médicos. 



Vuelvo para la rojita después de un rato disfrutando del oleaje. Antes he visto una Ducato blanca en el primer aparcamiento que ha debido de ver que donde el faro estaba libre y se han cambiado de sitio. No tenía ninguna duda de que se pondría al lado de la rojita, lo que no termino de entender es porqué ocupa dos plazas. Todo el mundo aparca en batería y llegan estos y aparcan así. 

Llega una vito amarilla, y no os lo perdáis, consigue aparcar entre la Ducato y la rojita, en un momento ha pasado de un aparcamiento normal, a una especie de campamento. Ahora si llega la policía fijo que nos multa a los tres, porque parece que hemos hecho un puto corro para estar nosotros dentro. ¿Veis ahora porque me gusta ponerme apartado de todo el mundo?

Suspiro y me siento en el lateral de la furgo. Veo por la ventana como los de la Ducato han sacado sus sillas y mesa, y están comiendo mirando al mar. No deben estar muy agusto ya que arranca la furgo y la acerca más a la vito. Como los de la mercedes abran la puerta trasera yo creo que pegaría a la Ducato. Que ganas de andar buscando movidas, pero si las vistas deben ser las mismas. 

Lo que más me jode, es que algunas personas que llegan veo como señalan a las furgos. Yo si pasara también pensaría que las tres furgos van juntas y han montado ahí un chiringuito. Imagen lamentable la que estamos dando tres furgonetas por la culpa solo de una. 



Es sábado, así que mínimo me queda convivir con esta gente hasta mañana domingo. Me preparo la comida y a descansar un rato sin dejar de mirar cada poco a ver que coño hacen mis vecinos. Los de la mercedes están dentro, no les he visto todavía, pero la puerta lateral no está bien cerrada así que estarán dentro.

El perro de los de la Ducato se acerca y mete el morro abriendo la puerta de la mercedes. Imagino que también tendrán perro y por eso le llama la atención, aquí todo dios tiene perro menos yo.

Es continuo el movimiento de gente que sigue viniendo andando a visitar el faro. No pensaba que fuera tan visitado el faro de las narices. De repente se abre la puerta de la mercedes y sale una pareja, han debido de estar comiendo y ahora parece que se van a visitar el faro con su perrito pequeño. Joder me siento un poco cotilla.

Vuelven enseguida de su visita, arrancan y se piran. Coño que sorpresa. Ahora por lo menos queda un poco disimulado y no parece que la rojita y la Ducato hayan montando un campamento. Estamos muy cerca pero se ve lo que hay entre las dos furgos y que yo no tengo nada que ver con ellos

Oigo otro motor, las luces de freno de la Ducato se encienden. A ver como coño se van a poner ahora. Como eche para atrás para pegarse más ya me da algo. Cierran las puertas y se marchan. ¿Perdona? Coño sorpresón, me dan ganas de abrir una botella de lo que sea. La verdad es que era un poco cantoso como se había puesto y si se van pues un problema menos si viene la policía.

El resto de la tarde siguen llegando vehículos constantemente, la gente aparca bien, hacen la visita y se marchan. Así es como debe ser. Algunos se ponen detrás de la rojita a ver el mar, cosa lógica porque las vistas son preciosas, mientras no meen, no hay problema.

Para las 18 horas salgo de la furgo y marcho a dar un paseo por el mismo sitio por el que fui ayer, la acera que va hacia Ribadeo bordeando la costa. Llego al primer parking y veo que hay una autocaravana, quizás no se haya atrevido a entrar hasta el faro. Yo con autocaravana también me habría quedado aquí, ya que si cuando te quieres ir hay muchos coches, donde el faro una autocaravana lo tendría complicado para dar la vuelta. La autocaravana es de alquiler, es exagerado la de vehículos camper de alquiler que estoy viendo. Maldita pandemia. Al lado de la autocaravana está la rojita de Javi, imagino que ha venido a dar un paseo con su familia.

Disfruto de las vistan dando el paseo, y nunca mejor dicho paseo, porque voy a paso de tortuga mirando el mar y el faro desde lejos. Me doy la vuelta enseguida y me cruzo con Javi que viene con su hijo, nos saludamos un momento y sigo para mi rojita a esperar a que llegue la puesta de sol.

Cuando llego al primer parking veo que un coche de la guardia civil va hacia el faro. Acelero el paso y antes de llegar ya me los vuelvo a cruzar de vuelta. Unas parejas que están pasando al lado de la rojita les oigo como dicen que si no sacan nada fuera no les tienen porque multar. Imagino que se refiere a la guardia civil y a mi furgo con el techo levantado.

Ahora solo queda esperar y ver el maravilloso espectáculo de ver ocultarse el sol. Me estoy dando cuenta de que en este viaje estoy diciendo mucho “espectáculo” pero es que es así, me está encantando esta zona de Lugo. 

No hay nada como ver los sitios con la furgo, te quedas en los sitios a dormir y se disfruta de momentos que antes con el coche no lo hacía. 


Disfrutando del atardecer veo como han llegado varias autocaravanas que se han quedado en el primer parking. Ostras como mola, en el parking del faro está lleno de coches viendo la puesta de sol y la enorme luna que hay esta noche, pero en cuanto se marchen me volveré a quedar solo. Además estando las autocaravanas allí, si viene alguien hay muchas posibilidades que se quede allí pensando que aquí está lleno. Me encanta estar solo, ya lo sabéis, pero me siento un poco apestado por aparcar todos en ese parking y dejarme a mi solo, ¿ahora resulta que me molesta que no aparquen a mi lado? No hay quien me entienda.

Es una pasada la noche que hace, pedazo luna, casi parece que se puede coger con la mano. Tengo que comprar un objetivo mejor para la cámara y poder fotografiar la luna, con el que tengo no se termina de apreciar bien.

Me niego a meterme dentro de la furgo, se está tan bien fuera. Hay gente disfrutando de las vistas de la luna desde el mirador, y otros están repartidos por el parking mirando. Un tío se pone al lado de la furgo, me mosquea porque está haciendo como que habla por teléfono, pero no me creo que lo esté haciendo. Si estuviera hablando por teléfono se separaría, no se juntaría. Creo que está cotilleándome la furgo. No pienso que lo haga con mala intención, pero si que está mirando disimuladamente. Yo es una táctica que también uso cuando he querido cotillear una furgo o autocaravana que me gusta, pero no estando el dueño al lado joder. Al final me quedo mirándole ya que ha cotilleado bastante y se marcha. Deja de mirar la furgo coño y disfruta de esta luna reflejada en el mar. Suspiro de la belleza que tengo delante. Joder me encanta. 


Se empieza a marchar todo el mundo, yo sigo mirando la luna, no me canso de mirarla, a ella y su reflejo en el mar. Se está tan bien que me animo a coger el trípode y bajar al faro a ver si consigo hacer una foto buena de noche con el faro iluminado. Estoy recién duchadito y con el pijama puesto, total ya aquí no viene nadie, y de hacerlo se quedará en el parking sin bajar a la puerta del faro. Pues nada, llevo unos minutos haciendo fotos sin conseguir la que a mi me gustaría cuando llega un coche. No se queda donde la rojita, que va, se pone justo donde estoy yo. Como entiendo a los asesinos en serie. Al menos tiene el detalle de apagar las luces incluso antes de aparcar. No se, igual es que quieren hacer un trío, pero es que vaya tela macho. Menos mal que las vistas del faro, escuchando el mar de fondo son, si, espectaculares. Ya lo he vuelto a decir. 

Dejo a la parejita que haga lo que quiera y me vuelvo para la rojita. Guardo todo y a dormir que mañana me espera más, además quiero madrugar para ver la salida del sol. Hoy de nuevo pongo la calefacción que poco a poco está refrescando otra vez y paso de levantarme luego de madrugada. Oigo otro vehículo, aparca en el parking, miro tras la ventana y es una T5 que se queda también a dormir. Imposible dormir solo aquí.


Domingo 28 de Marzo del 2021

Menos mal que puse la calefacción porque ha estado en marcha casi toda la noche del frío que hacía. En internet miré que el sol salía pasadas las 7 am. Lo que tengo dudas es si es con el horario de ayer, el de invierno, o con el nuevo, el de verano, que se ha cambiado esta noche.

Salgo de la rojita y aunque ya es de día el sol todavía no ha salido, pero si se nota ya el rojo asomando en el horizonte. Ni me he vestido, sigo en pijama, cojo el trípode y lo preparo todo.

Al lado de la T5 hay un coche donde no hay nadie. Miro hacia el faro y hay un tío que ha venido también con su cámara y está haciendo fotos. Que bonito es todo con los primeros rayos de luz. No me quiero perder nada, aunque la vista también se me va a la luna de vez en cuando que la tengo justo detrás.




El sol parece que no va a salir nunca, que ansia tengo. No debo tener prisa y si disfrutar de este maravilloso momento. 

Al final el sol aparece ante mi, madre mía. Me quedo sin palabras. Hago muchísimas fotos, aunque son todas iguales, al final me aparto de la cámara, también quiero mi momento, el de no hacer nada y disfrutar observando el sol. A veces uno se centra en sacar la mejor foto y no termina de vivir lo que tiene ante si, esta vez lo voy a disfrutar plenamente.  



Me quedaría aquí mucho más rato, pero hay que moverse. Cojo la mochila y tiro andando para Ribadeo. Ya desde la rojita estoy viendo que hay muchas autocaravanas en el primer parking, han venido más durante la noche. Incluso ha llegado una T4 que imagino que al ver las autos aquí, se ha quedado en este parking en lugar de intentar aparcar en el faro. Hoy de día cuando se de cuenta, imagino que se arrepentirá no haberlo intentado.

El paseo a Ribadeo son casi 3 km, tanto el viernes como el sábado ya he venido por aquí dando un pequeño paseo al atardecer, aunque no llegue a Ribadeo ninguna de las dos veces. Pasear por aquí con los últimos rayos de sol me parecía una autentica pasada lo bonito que era, pero ahora haciendo el mismo paseo al amanecer, me parece todavía más bonito, encima sin gente pues ya es lo más la tranquilidad que hay.




No he hecho ni la mitad del paseo cuando echo un vistazo al faro, que bonito y pequeño se ve. A la rojita ni alcanzo a verla, pero allí estará, o eso espero.

Llego a una pequeña explanada donde hay una furgo que tienen pinta que se acaban de levantar después de haber pasado la noche. El viernes cuando llegué ya vi que podía ser un buen sitio donde dormir, pero lo vi demasiado solitario teniendo en cuenta que iba a pasar varios días en el mismo sitio. Dormir solo no me importa, pero luego dejar la furgo tan sola durante el día y yo por ahí, pues me da cosa. 




Empiezo a ver ya a lo lejos el puente que une Asturias y Galicia. No me termino de acostumbrar a que si paso el puente y me pillan me pueden denunciar. En la zona asturiana hay una autocaravana, ha apurado al limite de su comunidad autónoma. Imagino que ellos también tendrán el mismo pensamiento que yo, que no pueden pasar el puente. Si es que la gente está hasta los huevos y quiere moverse. Encima luego vemos como los guiris pueden venir y nosotros no, pues ya dan ganas de ir a la Moncloa y prender fuego a todo.

Una vez que veo el puente, enseguida llego al fuerte que hay en la entrada a Ribadeo. En mi viaje a Ortigueira de Julio del 2019, ya estuve por aquí y os comentaba que el fuerte estaba cerrado, bien pues sigue igual, que pena tener una cosa así sin aprovechar.

Voy rodeando el fuerte y llego a las pasarelas que se adentran en el mar y desde donde hay unas vistas muy chulas. Ya las recorrí la otra vez pero me apetece volver a meterme a mirar. Al salir de ellas, en un cartel leo como estas pasarelas servían antiguamente para cargar barcos. He necesitado dos visitas para enterarme de ello.







Salgo de la pasarela y sigo para Ribadeo. Al llegar al puente de la autovía que pasa por encima, en lugar de seguir hacia el pueblo me meto por un paseo que tiene toda la pinta de ir hacia el puerto. Hay bastante pendiente pero se baja bien, porque está seco, por aquí mojado yo me caigo seguro. Según voy bajando empiezo a sospechar que por aquí voy a la ría, pero no a lo que es el puerto. Dudo de seguir bajando pero ya puesto voy a ver a donde me lleva. Al llegar abajo observo dos cosas, una que Ribadeo tiene playa para perros, esta aquí mismo donde termina el sendero, y la segunda es que el puerto por aquí se ve muy cerca, pero como no me ponga alas imposible llegar. Hombre también podría ir nadando pero va a ser que no. No queda otra que volver hacia arriba.

Una vez más, por querer acortar lo que hago es andar más. Y lo que no entiendo es porqué ese ansia de querer llegar antes si no tengo prisa ninguna.

Regreso al paseo por el que iba antes y enseguida encuentro una señal que me indica hacia el puerto. “Muy bien Baxa, si vas por donde van las personas normales no tendrás nunca ningún problema”. Pero que queréis que os diga, si hiciera eso no sería yo.

Llego a la entrada del puerto y una enorme señal indica que está prohibida la entrada a toda persona ajena a las actividades portuarias. La verdad es que lo pone en gallego, pero ya me ha costado escribirlo en castellano como para ponerlo en gallego. Lógicamente una señal de prohibición no evita que Baxa pase, aunque luego así vienen los líos. Me cruzo con un coche que sale del puerto, se me queda mirando, mierda ya me van a llamar la atención. Nada, falsa alarma, sigo para adentro.

Me sorprende lo grande que es el puerto, son todos barcos pequeñitos pero hay un montón. Lo que no se es donde leches se ha metido el barco enorme que vi el viernes por la tarde. 


Empiezo a dar un paseo por el puerto, a mi lo de los barcos como que no me llama mucho la atención. Lo veo todo muy bonito y tal pero no soy de los que sueña con tener un barquito para salir los fines de semana, yo soy mas de 4 ruedas y hacer km.

No hay nadie en el puerto, no me parece tampoco tan temprano como para que no haya nadie limpiando su barco o saliendo a navegar. Son las 8:30, bueno igual si es temprano, además con el cambio de hora es como si fueran las 7:30. Así que el raro soy yo, no los demás que están durmiendo. Pero el que ha disfrutado de la salida del sol mientras daba el paseo he sido yo, que todo hay que decirlo.

En el puerto a parte de barcos, también hay un restaurante y varias terrazas donde se ve en la barra que tienen todo tipo de cervezas para servir. Todavía están cerrados pero el caso es que hay negocios en el puerto por lo que no termino de entender lo de la prohibición para entrar al puerto. ¿A estos bares solo vienen los que tienen barco? lo dudo.

Paso de largo las terrazas y llego a la escuela de buceo. Deben estar empezando la clase, un grupo de unas diez personas están atendiendo al que imagino es el instructor. Se están poniendo el equipo y uno de ellos se acerca a la zodiac para empezar la clase. Bucear tiene que estar guapo, ver pececitos y todo eso, aunque a mi lo que más me llama es lo de pillarme una piragua, así que no descartéis ver algún día a la rojita con una piragua arriba. 



Salgo del puerto y sigo por la acera que va bordeando la ría, y tiene toda la pinta de llevarme a la ruta que he venido a hacer. Al otro lado de la carretera, en un pequeño jardín veo una casa en ruinas. Bueno no es ni casa, es una fachada. Ya por ser ruinas me llama la atención, pero el jardín que lo rodea está muy cuidado y hay un panel informativo, así que me acerco a mirar. “Al parecer una tradición señala que esta fue la residencia del obispo Paio Cebeira en 1182. Y también que fue el emplazamiento medieval, Torre das Cabanas”. Esto traducido del gallego, o sea que más o menos ponía eso.

Vuelvo para el paseo y sigo por la acera por la que iba. Un señor va delante con su perrito, de esos pequeñajos con mala leche, aunque este parece tranquilo. El hombre veo que de vez en cuando mira hacia atrás. Yo me hago un poco que no me doy cuenta hasta que al final me canso y me quedo mirándole. Coño con tanto mirar. A ver si es que tiene miedo que lo vaya a violar, pues la lleva clara, no te jode el tío.



El tío se mete hacia otro puerto, este parece más para actividades industriales y barcos más grandes, aunque solo veo uno, el de aduanas. Menos mal que el tío se ha pirado, me iba poniendo muy nervioso tanto mirar.

El paseo poco a poco se pone más feo, dejo de ver la ría y voy por una zona industrial, vaya rollo de sitio. He pasado de un lugar idílico a casi un polígono. Mi único entretenimiento es ver como al fondo hay un segurata de prosegur probando la valla subiéndola y bajándola. Si que tiene que estar aburrido.

Me acuerdo de mi época de vigilante, si amigos, también he trabajado de eso. Vigilaba siempre de noche el complejo deportivo donde entrenaba el Eibar y aparte todo Eibar iba a hacer deporte. Estaba en lo alto de un monte y en cuanto se iban los últimos, me quedaba yo solo en una zona muy grande. Me lo pasaba pipa, primero tenía que hacer la ronda. Para que la empresa se asegurara de que la hacía, me obligaban a quitar los banderines de los cornes de los campos de futbol y que estaban lejos de mi puesto. La verdad es que me molaba pasear sabiendo que estaba solo en ese lugar tan grande. Cuando terminaba la ronda me ponía la ropa de deporte y me iba a correr a las pistas de atletismo, me daba un par de vueltas y luego al gimnasio un rato. Al terminar me daba una ducha y me subía a un despacho a ver “Crónicas Marcianas”. Los viernes cuando subían parejitas y aparcaban en los exteriores, yo me quedaba esperando a escondidas hasta que el coche empezaba a dar saltitos, entonces encendía los focos para iluminarlos y me partía de la risa viendo como el coche arrancaba y se marchaba a toda leche. A más de una pareja le habré ahorrado quedarse embarazados. En otra ocasión veo que un coche de la Ertzaintza está parado a unos cien metros de la puerta de entrada. Sin encender ninguna luz abro la puerta por la que entraban los coches a las instalaciones deportivas y me pongo a fumar un cigarro. De repente veo que el coche de la policía empieza a moverse con las luces apagadas, yo hago como que no me doy cuenta pero vamos, era evidente verlos aunque estuviera todo a oscuras. Cuando quedan pocos metros se bajan los dos policías y vienen hacia mi pidiéndome la documentación y a ver que estoy haciendo ahí. Yo les digo que estoy trabajando, y les señalo la chapa hortera de vigilante de seguridad. Se quedaron muy cortados y se disculparon, pero no se tenían que disculpar, estaban haciendo su trabajo. De vez en cuanto también venían amigos a visitarme y acompañarme un rato en la madrugada, así que no me puedo quejar. No estuve mucho tiempo porque me pagaban una mierda y encima cuando les dije que me iba los últimos días no me pagaron, pero a pesar de todo tengo buen recuerdo porque me lo pasé muy bien.

Bueno vale de batallitas, dejo atrás al de proseguir y su barrera y sigo mi ruta. Igual no es por aquí ya que esta zona industrial no me cuadra con un paseo por la ría, pero yo creo que si, porque unos metros atrás he visto un pivote de estos de las rutas que decía que es el “Camino natural de la ruta del Cantábrico”.


Al lado de una nave industrial hay más indicaciones, una señala hacia As Aceas, molino de mareas. Genial, es por aquí, lo malo es que solo hay 2,5 km hasta allí. Es meterme por el sendero que indica la señal parece que entro en otro mundo. Nada de naves industriales, todo verde paseando por el borde de la ría.


Veo unos bancos de piedra ideales para parar y desayunar un cachito de bizcocho mirando a la ría. Justo detrás hay unos baños públicos que de nuevo han sido vandalizados. Lugares públicos que pagamos entre todos y se conserven bien, conozco pocos. En fin lo de siempre.

Mientras desayuno, empiezo a ver que poco a poco la gente se va animando a salir, unos pasean perros, otros hacer deporte, o simplemente caminar, vamos que se me acabo la tranquilidad. De todos modos parece que han pasado todos a la vez porque en cuanto emprendo yo la ruta vuelve a estar todo vacío. 



Me levanto y vuelvo a ponerme en marcha. Sigo bordeando la ría, pero el camino empieza a ir al lado de la carretera. Las vistas de la ría son igual de bonitas que antes, pero el ruido del tráfico jode un poco el momento. La verdad es que me da un poco rollo ir por aquí, con lo bonito que estaba siendo el tramo anterior.

Como esta ruta que estoy haciendo es corta, doy por hecho que ya todo será así, pero el sendero se desvía de la carretera y vuelvo de nuevo al silencio. De vez en cuando me cruzo con alguien, menudo privilegio poder pasear por aquí cerca de casa. Realmente bonito.

No recuerdo cuanto ponía la señal que vi antes, pero no eran más de 3 km, y en cada curva me da la sensación que me voy a encontrar el molino que se supone que es el fin de la ruta. Voy a gusto y sin prisa, pero yo juraría que llevo ya más de 3 km y no veo el molino, yo capaz de habérmelo pasado de largo.

Llego a una pequeña bajada y ya veo abajo el molino, el camino parece seguir, así que igual puedo alargar la ruta un rato. El molino en sí no tiene nada especial, lo bueno es su ubicación en la ría.

Sigo por una especie de pasarela, pero nunca el fin de una ruta estuvo tan clara, vamos es que no dudo ni yo. El camino se termina y punto, no hay discusión.






Me doy la vuelta y vuelvo para Ribadeo a donde llego unos minutos antes de las 11 de la mañana. El pueblo todavía está tranquilo a pesar de ser la hora que es, para mi tarde. Voy paseando por una bonita arboleda que me lleva directo a la Plaza de España. Mientras una camarera está preparando la terraza de su bar, observo como a mi derecha hay un edificio precioso, en maps pone que es la Torre Dos Moreno. Justo en frente de este edificio, que aunque se llame torre a mi me parece un palacio, se encuentra la iglesia de Santa María Do Campo, también muy bonita.

Quiero hacer más fotos a la iglesia, pero delante hay un parque con niños jugando, para evitar que salgan en las fotos tengo que hacer virguerías pero sin conseguir una buena foto. Una madre veo como me esta mirando, paso de que alguna llame a la Guardia Civil, así que continuo mi visita guardándome la cámara. 



Salgo de la zona arbolada y me meto por una calle estrecha con muy buena pinta. No me he equivocado al meterme por aquí, y ha sido por pura suerte, me encuentro con lo que parece un antiguo cine, el cine Colón. La casa está reformada pero han dejado el antiguo cartel del cine.

Sigo bajando y llego a una pequeña plazoleta donde hay una fuente antigua, la plaza Dos Cuatro Cantos. Como disfruto bajando por esta calle completamente vacía y que tanto juego me está dando en poco espacio, debe ser la parte vieja del Ribadeo.

Llegando al final de la calle empiezo a ver las pasarelas que esta mañana descubrí que habían sido un antiguo cargadero de barcos, encima de haber elegido bien la calle, por lo bonita que es, me ha traído justo para enlazar la ruta hacia la rojita.




Me meto hacia el puerto para ir recorriéndolo también de vuelta hacia la rojita. Podría haber ido por una calle, pero me parece más divertido por aquí aunque ya haya pasado antes. Antes había poca gente, pero al menos estaban los aspirantes a buceadores, ahora ni eso, está completamente vacío. Me encanta este pueblo, que tranquilidad.

En una esquina veo en una pared un monumento dedicado a Calvo Sotelo, en un principio lo confundo con Camilo José Cela, joder si es que son igualitos. Se ve que debía ser de Ribadeo, yo lo desconocía. Bueno, que no se si es de aquí, pero teniendo un monumento digo yo que si será. 

Vuelvo al paseo que va bordeando el mar fijándome en las bonitas vistas que hay, pero que ya no son las mismas que a primera o ultima hora, vamos es que no tiene nada que ver.

Quedando 15 minutos para las 12 llego a la rojita, el parking está vació, solo hay una T6 bicolor, a pesar de la tranquilidad de vehículos, la romería hacia el faro de gente andando es constante, todo el mundo sigue aparcando en el primer parking. 



Que bien entran las cervecitas después de estar toda la mañana andando. Me preparo el vermut que tomo siempre después de la ruta, y me siento en la parte trasera de la furgo bajo el portón mirando al mar. Estoy tan a gusto, que después del vermut cojo el libro y me pongo a leer sin moverme de sitio. Algunas personas que se acercan al mirador que hay detrás de la furgo, no se si miran con envidia o estupor, pero noto que les choca verme aquí sentado. Ríase la gente, ande yo caliente, traducido, mira lo que quieras que yo estoy de puta madre aquí sentado. 


Después del rato de lectura me meto en la furgo a descansar un rato. Llega una pareja joven en un coche y se quedan aparcados justo al lado de la rojita. Me quedo mirando tras la ventana, puto cotilla, y el tío se empieza a liar un porro mientras ella mira el móvil. Una vez liado su cigarrito se baja del coche y da una vuelta a la rojita, se ve que le gusta. El chico lleva el pantalón con medio culo a la vista, no se si es que se cree que va a la moda o que es un puto dejado. Sea cual sea el motivo, que puto cerdada verle a un tío los pelos del culo, joder córtate un poco colega. Se baja la chica del coche y marchan hacia el faro, menos mal. La imagen de ese culo tardaré en olvidar. Súbete el pantalón guarro

Sigo viendo la tele cuando vuelvo a ver al tío peludo otra vez, joder que visita más rápida. Gracias a dios se suben en el coche, no se van pero dentro del vehículo me ahorra las vistas tan desagradables.

Miro el móvil y veo que son las 14:30, todo lo que tenía planeado de ver por aquí ya lo he visto, podría ir a la playa de las Catedrales que tengo intención de visitarla mañana. Vale que hoy domingo a esta hora igual no es la mejor hora para ir, pero en el caso de que no encuentre aparcamiento, pues marcho a otro sitio a pasar la noche, está todo muy cerca.

Recojo todo, bajo el techo, o mejor dicho, intento bajar el techo, no cierra. ¿Qué cojones pasa ahora? Bajo de la furgo y no veo nada raro, está todo bien, vuelvo a intentarlo, nada, no baja. Como soy un puto cabezón, bajo a lo bestia el techo pero sigo sin poder cerrarlo. Se baja el del coche y me dice que no me va a cerrar, que tengo la tela del techo pillada. Me dice que mete él la mano y que lo baje yo. Se lo agradezco pero le digo que no, que tiene que cerrar solo. Agradezco al chico el detalle, pero me ha jodido el que él se diera cuenta y yo no. 

Me quedo sentado en la cabina intentando hacer ver al del coche que lo tengo todo controlado. Me cago en to, a ver ahora como consigo cerrar el puto techo sin que el del coche vea el estropicio que seguro he hecho. 

El tío que me da a mi que es muy listo, arranca y se van. Seguro que está pensando, vamos a irnos que este gilipollas se va a quedar ahí esperando hasta que no nos marchemos nosotros y no veamos lo que ha jodido. Pues si, básicamente estaba haciendo eso, al marcharse levanto el techo y veo que se ha roto la lona por el mismo sitio que la otra vez. Hasta el parche que puse se ha roto, que puto desastre. Lo que no entiendo es porque ahora se ha quedado pillado, no hace aire, tenía que haber bajado sin problema, y encima con la puta cuerda que le puse para ayudar a recoger la lona tenía que cerrar sin problema. Intento bajar el techo y ahora cierra bien. Tengo parches en la furgo, tendré que poner uno nuevo.

Un consejo que os voy a dar, si tenéis una furgo nunca forcéis, si no cierra es por algo. Si, ya se que vosotros sois personas normales que no forzáis, aquí el único cabezón idiota que no aprende la lección soy yo, eso ya lo se. Pero si en el hipotético caso que haya algún pardillo como yo, pues que no fuerce.


En apenas unos minutos llego al parking de las Catedrales. Está a tope, vale que hay sitios libres pero eso no quita para que haya mucha gente para mi, aunque me esperaba más. Nada más llegar veo aparcada la mercedes amarilla que ayer estuvo pegada a mi, yo aparco separado de ellos, bueno de ellos y de todo el que pueda. Donde aparco se está bien pero es muy pegado a la carretera, no se el tráfico que habrá por la noche pero no me termina de convencer. Muevo la rojita y me pongo en primera línea hacia el mar, pero en una esquina que se ha vaciado y quedan pocos coches. El sitio está bien pero lo dicho, demasiado humano, pero siendo domingo y a esta hora pues bastante que he aparcado. Hay varias autocaravanas y camper desperdigadas por el parking, lo bueno es que parece que la marea acaba de subir y la gente se esta yendo.

Monto el chiringuito y marcho a dar un pequeño paseo para cotillear que ambiente tenemos por aquí. Hay una zona de mesas donde varias familias están preparando todo para comer, hay un montón de mesas por lo que para el que quiera todavía le quedan mesas libres. En vista del gentío que hay me doy la vuelta, y de nuevo a la rojita a leer un rato más con esperanza de que termine de irse todo el mundo siendo domingo por la tarde. 






Al parking solo llega algún coche despistado que no ha mirado las mareas, los coches por lo general se están marchando, incluso alguno que llega al momento se marcha. Uno de los que llegan pero no parece despistado es un coche de la policía local. Aparcan al lado de la mercedes amarilla y se van directos a donde una autocaravana. No jodas que les van a echar. Miro y no parece que tengan nada fuera, vale que igual están ocupando más de una plaza, pero si antes que estaba a tope no han tenido problema, ahora que cada vez hay más aparcamiento sería la leche que les denunciaran. Han pasado al lado de la rojita y no se han parado, así que o vienen luego, o al de la autocaravana le ha pasado algo. Lógicamente dejo la lectura y no quito ojo de ver que pasa. Veo como uno de los policías habla con el señor de la autocaravana, me quedo con la duda, pero la policía se va y la autocaravana sigue en su sitio.

A media tarde llega una T4 de donde se baja una señora con dos perros pequeños. Se acerca a mi y dándome las buenas tardes me pregunta si voy a dormir aquí. Le digo que si, y entonces me dice que siendo así que ellas también se quedarán, que si no se irían al pueblo. Lo de siempre, sigo sin entender esta aptitud, yo deseando quedarme solo, y los demás buscando a gente para no dormir solos.

Para las 18 horas, aburrido de ver gente pasar por la puerta lateral de la rojita, marcho a dar un paseo y así ver el camino mañana por la mañana que es cuando veré la playa con la marea baja. Lo malo, es que la marea baja mañana si no recuerdo mal es pasadas las 11 de la mañana. Como me jode, para a esa hora ya estará todo el mundo aquí, ojala fuera a las 7 de la mañana. De todos modos mañana es lunes y la gente trabajará, igual tengo suerte y estoy solo.

Me acerco al acceso que baja a la playa, ahora imposible estando la marea tan alta. Aunque se ha ido mucha gente, todavía queda mucha. En el parking no se ven tantos coches para luego la cantidad de gente que hay por aquí paseando. Parece mentira que donde ahora hay tanta agua y llegan olas tan grandes, mañana se pueda pasear tranquilamente. Dicen que las mareas es por la luna pero yo no lo termino de entender. 


Voy por una pasarela de madera que va bordeando la carretera y es por donde va paseando la gente, así que llevará a algún sitio. La pasarela parece un poco scalextric donde tienes varios caminos para elegir. Yo bajo por uno que me lleva a una playa, aquí aunque la marea esté alta se puede estar. De todos modos no me fío mucho y me quedo bastante cerca del acceso por si viene una ola grande y tengo que salir por patas.

Una pareja que me está mirando desde arriba, bueno a mi no, a la playa, empiezan a bajar por la pasarela a la playa, así que yo para arriba que aquí no tengo nada que hacer. Al cruzarme con ellos me dan ganas de decirles que tengan cuidado que algunas olas llegan bastante arriba, pero como al cruzarnos, siendo un lugar tan estrecho no son capaces ni de mirarme a la cara o decir un puto hola, pues por mi como si se ahogan.

De nuevo en la pasarela sigo por ella con ganas de descubrir más sitios para mañana con la marea baja poder visitarlos. La pasarela se mete como hacia el mar, así que voy para allí. Veo a lo lejos que la pasarela se termina, pero no hay nadie, a ver si hay buenas vistas. Al llegar veo que no son buenas vistas, son las mejores de la playa de las Catedrales, impresionante lugar. 




Ya me queda claro para mañana por donde voy a ir para ver la playa con la marea baja. Ahora me vuelvo para la rojita a pasar el resto de la tarde sin dar un palo al agua.

Me siento en el lateral de la furgo, ya sabéis que es mi lugar favorito, y a ver la tele y como pasa continuamente gente. Joder me he puesto en la esquina pensando que estaría apartado de todo el mundo y esto parece la Gran Vía. Al final me meto dentro para tener más intimidad porque llega un momento que se me hace incomodo, algunos pasan por la misma puerta.

Sale la señora de la T4 y, como no, también ella pasa al lado de la rojita. Se queda mirando fijamente hacia mi, entiendo que ella a mi no puede verme aunque yo a ella si. La señora antes me dijo que se iban a quedar a dormir, pero yo la veo siempre sola, ¿se referirá a ella y a sus perros? Pues seguramente, porque en la T4 no se ve a nadie a parte de a ella.

La tarde va oscureciendo y mi amiga Yola me dice que hoy habrá una luna impresionante, ella en Cádiz no podrá verlo ya que me comenta que está nublado, pero aquí al estar despejado si podré. Pues es decírmelo y yo salir de la rojita a ver la luna y empieza a nublarse. Más que nublarse parece bruma, pero sea lo que sea da igual, por solidaridad parece que me voy a quedar también sin ver la luna. De todos modos no me importa mucho, después de la luna de ayer, me doy por más que satisfecho.

Llega una furgo que tiene toda la pinta de que en su día fue para llevar mercancías pero ahora la han camperizado, la matrícula es extranjera pero aunque me conozco bastante las europeas, esta no me suena de nada. Mañana de día ya iré a cotillear. En la furgo va una pareja joven que aparcan cerca de mi pero lo suficientemente separados para no incordiarnos ni ellos a mi ni yo a ellos. Yo no he puesto calzos ya que el sitio esta nivelado, ellos no opinan lo mismo y calzan el vehículo, todo eso está muy bien, el problema es que han aparcado tapando toda la acera. Lo hacen para que el morro no sobresalga del aparcamiento, pero creo que es peor el remedio que la enfermedad. Mañana si viene mucha gente igual les llaman la atención. 


Mientras espero un rato por si se despeja, veo que un hombre se pone en la entrada del parking mirando a la luna. Creo que también está pendiente de que se despeje y poder disfrutar de las vistas. Puede que no tengamos suerte porque cada vez hay más bruma, pero en vista de que el hombre aguanta, yo me quedo también esperando.

Llega un taxi, para donde el señor, este se sube y se marcha. Tócate los cojones, ni luna ni ostias, lo que hacia era esperar al taxi, y yo aquí fuera en solidaridad con él. Anda por ahí, venga para dentro de la rojita que empieza a refrescar. Ya solo quedamos las dos furgos y varias autocaravanas, los coches prácticamente se han ido todos, quedan muy pocos.

Me entra hambre y me preparo unos sándwiches en una sandwichera que me pille en Amazon. Es muy cómodo y así puedo comer calentitos los sándwiches. Oigo fuera movimiento de vehículos, deben ser los últimos coches que están terminando por irse.

Siendo ya de noche cerrada y tomándome un kalimotxo, salgo de la rojita para ver que temperatura hace. La verdad es que se ha quedado una noche buenísima, la pena es que sigue habiendo bruma y la luna oculta. Mientras me tomo el kalimotxo dando una vuelta a la rojita, veo que la señora de la T4 ha movido la furgo y se ha puesto a mi lado, antes estaba en un aparcamiento en la parte de atrás. Y entre la T4 y la furgo que llegó antes de la pareja extranjera, han llegado tres pedazo autocaravanas integrales pegadas unas a las otras. Yo os lo juro, y se que soy pesado, pero no me jodas con todo el parking que hay y como se aparcan así tan pegadas. Y juntas no vienen porque una de ellas es extranjera. Es que casi ni pueden abrir la puerta lateral de lo pegadas que están. Para flipar, por eso me gusta aparcar en las esquinas, ya que por ese lado al menos puedo librar que me aparque algún cansino. 


Aquí ya no hay nada que rascar, así que me voy para la rojita con un poco de pereza, porque se ha quedado muy buena noche y se está de lujo.


Lunes 29 de Marzo del 2021

Unos minutos antes de las 8 ya estoy despierto, como siempre he dormido de maravilla. Aquí no se oye tanto el mar como estas noches anteriores en el faro, y en parte se agradece, estaba ya un poquito del ruido de las olas hasta los huevos.

Salgo de la rojita y ahí están, las autocaravanas pegadas, ains dios, que gente. La señora de la T4 ha dormido con el techo bajado y la ventana a medio bajar, joder pues a mi me ha saltado al calefacción. Que lástima teniendo techo elevable y dormir abajo. No se donde habrá metido a los perros para que quepan todos.

Como hasta las 11 si no recuerdo mal, no baja la marea, tengo tiempo de sobra para irme a dar una vuelta por ahí. Me queda ir desde aquí hasta Rinlo, para así hacer el tramo entero de costa, pero teniendo que estar aquí a una hora, casi prefiero dejarlo para mañana y así luego no tener que andar corriendo para estar aquí con la baja mar.

Pues nada, preparo la mochila y marcho a ver que me encuentro por ahí. Mi primer destino es al ladito del parking, justo en la entrada por donde se baja a la playa de las Catedrales. La marea ya ha empezado a bajar, aunque todavía le queda mucho, tengo tiempo de sobra para ir por ahí. ¿No os habéis preguntado nunca como saben cuando baja o sube la marea? Es un puto misterio. Se que si miro en google me lo explicará, pero a veces es mejor ser un poco más ignorante y que todo sea más mágico. Joder me acaba de venir a la memoria la época en la que fumaba porros. 


Vuelvo a la pasarela por la que fui ayer, y me dirijo hacia la playa de Arealonga que está a 1,5 km del parking. Daré un par de paseos por la playa haciendo fotos y así podré calcular la hora para volver sin prisas. 

Paso a la altura de la playa a la que bajé ayer, aquí si que se nota mogollón que ha bajado la marea, si ahora está así, luego cuando baje del todo será todo arena.

El sol todavía no ha salido, es una de las pocas pegas que tiene Galicia, que amanece tarde, y para un madrugador como yo es una putada. De todos modos los paisajes son preciosos incluso con esta  poca luz. 



Llego a la playa cuando son casi las 8:30, se ve una playa enorme, perfecta para dar buenos paseos. Justo delante hay un camping, parece que lo que más hay es gente fija con sus caravanas que no se han movido en mucho tiempo. Oye hay que respetar todo, cada uno a disfrutar como le guste de su vehículo. Veo que también hay una camper con el techo elevado, o sea que algún nómada también hay.

Pasado el camping hay un gran restaurante que lógicamente ahora está completamente cerrado. Eso me da igual, pero me llama la atención que en la parte trasera se ve un camión y varios coches abandonados. Vale que el futbol no me gusta, y tampoco me gustan los debates en los que se presume de quien la tiene más larga, pero aun así soy un hombre, y por lo tanto no soy perfecto. Si hay coches abandonados dejo todo lo que estoy haciendo y marcho a verlos, lo siento pero no lo puedo evitar. No os pondré fotos, pero las hice, y muchas. Cuando alguna se ha hecho ilusiones al conocer a un hombre que no le gusta ver deportes por televisión, enseguida se ha desilusionado al ver como no me gusta eso pero si me gusta ir detrás de coches viejos y si están tirados en el monte mejor. Imagino que dentro de lo malo, mejor compartir la vida con alguien que le guste el futbol a no con un loco de lo abandonado. 

Vuelvo para la carretera y de nuevo hacia la playa, a ver si encuentro un sitio por el que entrar. 


Todo empieza a coger un tono anaranjado, me doy la vuelta y a mi espalda está naciendo el sol del día de hoy. La gente debería mirar menos el móvil y más estos espectáculos de la naturaleza. ¿Puede haber algo más maravilloso que esto? ¿Os conté ya esto ayer no? Bueno no quiero ser tampoco pesado, pero yo no me acostumbro a estas cosas que nos regala la naturaleza cada día. Y lo mejor de todo es que no hace falta ir a un lugar en concreto para ver nacer el sol.

Me vienen a la cabeza los paisajes que he visto viniendo hasta aquí, joder ahora con el sol de fondo serán mucho más bonitos. Pues que le den a la playa, me vuelvo para atrás y ver si puedo sacar mi vena fotográfica. Bueno la vena fotográfica la tengo, lo que me falta es la vena del fotógrafo bueno, aunque hago lo que puedo y poco a poco voy aprendiendo. Esto es para que ahora vosotros en comentarios me digáis que si soy un gran fotógrafo, que mis fotos os gustan mucho, y luego yo al leerlo me llene de orgullo. Así que escribirlo cabrones que si no quedaré fatal. No lo vais a escribir, si os conozco ya a varios, y quitar esa sonrisa de maldad al leerme.

Me voy a centrar en el sol, que él nunca me falla ni se ríe de mi. 


Antes cuando iba hacia la playa, he visto un precioso arco, que ahora saliendo el sol de fondo quedará la foto mucho mejor. Acelero el paso para que no se me escape, en mi cabeza la foto se ve perfecta, hay que acelerar para llegar cuanto antes.

El ritmo es bueno, pero no veo el dichoso arco, ¿a que por venir tan rápido me lo he pasado?, me cago en "to", putas ansias que me entran a veces. Casi pensando en dar la vuelta veo el arco, genial. Me acerco para pillar el mejor ángulo, me arrimo a la valla, en mi cabeza la foto no quedaba así. El sol salía a través del arco y me daban el premio Pulicher. Pues no, la realidad es otra, desde aquí no puedo pillar mejor ángulo y es lo que hay, tanto correr “pa na”. Segunda oportunidad que tenéis para decirme, tranquilo Baxa, te ha quedado genial la foto, eres el mejor. Panda de mamones que sois. 


Donde si puedo tener foto chula, es en el mirador en el que estuve ayer, donde se veía a lo lejos la playa de las Catedrales, está aquí al lado así que voy para allí.

En pocos minutos estoy en el mirador, la verdad es que la imagen desde aquí es una pasada, pero quiero más. Hay señales por todos lados donde indica que si te sales de la pasarela y pisas hierba te puede caer una multa de 600 euros a 600 mil. Va, será por dinero, además si ahora no hay ni dios. Paso al otro lado de la valla y voy siguiendo un pequeño sendero, lo cual demuestra que no soy el primero en venir. Saco el trípode, monto todo el chiringuito y a buscar la mejor foto. De vez en cuando, si oigo un motor a lo lejos, levanto la vista por si es la benemérita, pero siempre son coches de gente que pasa de largo.

La verdad es que es un poco peligroso estar aquí, un resbalón y me quedo como decoración en la playa de las Catedrales. Voy a hacer la foto y pirarme de aquí que al final me voy a ostiar.


Me quedo un rato apoyado en el mirador haciendo tiempo, es pronto para bajar a la playa de las Catedrales, y tarde para volverme a la playa por la que iba a pasear hoy. Ahora sería un buen momento para echar un cigarro, pero claro lo dejé hace años, no es cuestión de volver a empezar. A pesar de los años, todavía hay algún momento de debilidad, son muy pocas veces, pero hay que tener cuidado y no recaer.

Al final marcho poco a poco para la playa de las Catedrales. Son ya las 10 de la mañana y ya hay tramos por los que se puede andar. Para visitar este lugar hay que hacer reserva, pero solo es en temporada alta de verano y semana santa. Si, lo se, es semana santa, pero entiendo que semana santa para esto de la reserva será desde el jueves hasta el lunes que son los días festivos, ¿no?.

Aquí lo que es ahora al menos no hay nadie, ni visitantes, ni alguien pidiendo los papeles de la reserva. En el parking todavía no hay movimiento, ¿la gente todavía duerme? Madre mía. Bueno yo voy para la playa, si alguien me dice algo pues me hago el guiri. Cuando voy a empezar a bajar las escaleras llega un coche, se baja un tío con una cazadora fluorescente. Me caguen, ¿este será el de las reservas? Pues marcho para abajo cagando leches. 

Bajo por las escaleras que ahora sin agua, ayer golpeaban las olas justo aquí fuertemente. Este sitio mola con la marea alta, pero no tiene punto de comparación verlo con la marea baja, y eso que todavía quedan casi dos horas para que baje del todo. 


Bajo a la arena, todavía está húmeda y no me termino de fiar que no venga alguna ola chunga que tenga ganas de joder la marrana. Si faltando dos horas está ya así, luego cuando esté baja del todo será una gozada pasear por aquí, pero todavía algunas olas se acercan amenazantes. Ya hace años de la otra vez que estuve por aquí y no me acuerdo bien hasta donde baja, solo recuerdo el puto gentío que había que parecía el 8 m.

Empiezo mi paseo por la playa de las Catedrales, me viene a la cabeza el Mont Saint Michel. He tenido el privilegio de pasear por sus calles completamente solo, y ahora me pasa lo mismo en la playa de las Catedrales, me encanta la sensación. Recuerdo cuando alguno de vosotros me preguntó como pude hacer fotos de Setenil de las Bodegas sin gente, es fácil, solo hay que madrugar. Y esta vez ni eso, porque son las 10, pero se ve que la gente no viene hasta que no esté baja del todo.

Mi paseo es breve, no puedo seguir caminando ya que llego a un tramo en que las olas golpean el muro de roca, tengo que esperar a que baje la marea un poco más para poder continuar. Que más da, es tan bonito todo esto, y tan solitario que no me importa estar aquí parado. Es prefecto. 



Justo al lado de donde estoy esperando hay una cueva, no parece muy profunda pero todavía entran las olas por ella, así que sigue tocando esperar. Me acerco a las olas como si mentalmente así acelerara la bajada del mar, lógicamente no me hacen caso y en alguna ocasión tengo que ir corriendo para atrás porque si no me calo. Esta vez no es por culpa de olas que se nieguen a seguir bajando con la marea, es culpa mía de tentar a la suerte y creerme Moisés.

Moisés no seré pero parece que funciona y enseguida las olas dejan de llegar a la cueva y puedo meterme por ella. Apenas puedo adentrarme unos metros y llego al final. Vamos que un garaje tiene más profundidad que esto, pero eso no quita que esté muy guapo el sitio.


Salgo de la cueva y echo un vistazo a lo que llevo recorrido, tanta ansia de avanzar y me estaba perdiendo la impresionante imagen que dejaba detrás mío. No entiendo como sigo solo, que pasada de lugar.

Me acerco a donde rompen las olas para ver el acceso a la playa, el tío que vino con la cazadora fluorescente parece que es el encargado de limpiar los baños, así que nada, no hay problema en no tener reserva. Como todavía no puedo avanzar, me quedo mirando romper las olas, en un momento veo como gente con chaleco amarillo empieza a ponerse en el acceso. Ostia tu, ahí están, pues si que hace falta reserva. ¿Y esto como irá? ¿Bajaran a la playa a pedir la reserva de la gente?, ¿se pondrán solo en el acceso para controlar? Pues ni idea, pero para salir de aquí tengo que pasar justo por donde están ellos, pero a mi si no me dicen nada yo no salgo. Como quien no quiere la cosa me salgo de su ángulo de visión para ver si me puedo escaquear. Voy a seguir disfrutando de esto y que me quiten lo bailao. 


Consigo pasar a la siguiente zona, donde hace unos minutos estaban las olas, ya han dejado de llegar y es seguro pasar. El lugar al que llego ahora me vuelve a recordar mucho a Normandía con los pedazo altura de los acantilados.

Recorro la playa y de nuevo llego a un punto sin poder seguir, joder me siento como en un juego pasando pantallas. Así no hay quien se libre de los chalecos amarillos, me van a pillar seguro. Aunque creo que ya me han visto, pero fijo que les pagan una mierda y no les sale rentable venir hasta aquí para decirme que me salga.

En esta zona también hay varias cuevas, así que me entretengo mientras baja más la marea visitándolas. Son todas iguales, pero mola la tensión de mirar hacia atrás por si viene alguna ola asesina. La verdad es que en el peor de los casos solo me mojaría los pies. 




La marea baja pero es imposible pasar al oro lado si no escalo por una roca. La charca que separa las dos zonas no creo que se vaya a secar por mucho que las olas no lleguen. Pues yo voy a escalar, ya puestos a hacer ilegalidades, pero es que si espero a que baje me pueden dar las uvas. Para que el agua libre esta última roca hay muchos metros todavía y no quiero esperar tanto.

Me pongo a escalar, en mi cabeza oigo como los chalecos amarillos me chillan diciéndome que soy un inconsciente por subir por ahí y que es ilegal. Paso la roca como encogido, así me da la sensación que no me van a ver, pero vamos, es absurdo, y más con la mochila roja que llevo que se me ve a leguas.

Ya en el otro lado parece que no he avanzado, es una playa muy parecida a la de antes, incluso en los acantilados. Desde aquí ya no me ven desde la entrada, pero igual al verme escalar si vienen a por mi. Mientras no sean los del Seprona. 


Aquí no hay atajo que valga, ni escalar ni leches, imposible seguir, así que toca esperar, y va para rato porque falta mucho para que baje la marea. Se podría pasar por unas piedras, pero son de estas que resbalan solo con mirarlas. Lo intento, pero al segundo paso ya me resbalo. Si yo me caigo y me rompo la crisma ya me curaré, pero si se me jode la cámara me da algo. Mejor me voy a quedar quitecito

Mirando a los alrededores mientras espero, me doy cuenta que tengo ante mi uno de los lugares más bonitos de la playa de las Catedrales, y también de los más conocidos por la gran cantidad de fotos que he visto desde este mismo ángulo en el que me encuentro. Le hago mogollón de fotos, no se porqué ya que resultan todas iguales, pero es tan bonito que parece que haciendo fotos lo voy a disfrutar más, una chorrada. Mejor dejarse de fotos y mirar cara a cara esta maravilla de la naturaleza. Es una pasada de bonito.



Oigo voces que me hacen volver a la realidad. ¿Voces? Miro hacia atrás y veo que se acerca la puta marabunta. Bueno es solo una familia pero para mi es demasiado. Se ve que ya dejan acceder a la playa a la gente que ha hecho la reserva. Se acabo la paz. Detrás de la familia viene otra, y otra. Este paraíso de repente deja de serlo.

Los primeros que llegan son un matrimonio con sus dos hijas que parecen poseídas, corren de un lado a otro descalzas mojándose los pies. No tienen fin las niñas, dios que energía. El macho alfa, o sea el marido no duda en meterse por las piedras para pasar al otro lado. Yo me río para mi, menuda ostia se va a dar, ya veo al helicóptero aterrizando aquí, eso vendrá genial para el blog. Pero no, el muy capullo es bastante más ágil que yo y pasa las piedras como si fuera andando por la Gran Vía. Llega un momento que no se le ve, ha debido cruzar ya. La mujer y las niñas poseídas siguen aquí a mi lado, ¿la playa es grande eh? Pero no, aquí todos juntitos.

Llega la siguiente pareja, coño si son los guiris del camioncete camperizado que ocuparon la acera ayer al aparcar. Me siento mejor al ver que intentan pasar las piedras pero no se atreven a hacerlo, en cuanto se resbalan se vuelven a la arena.

Sigue llegando gente, esto empieza a parecer una estación de metro. Todos juntitos aquí esperando a que baje la marea. Yo ya no se ni donde mirar de todas las caras que tengo a mi alrededor.

Algunos se dan la vuelta, otros como yo siguen esperando. El “Calleja” que pasó por las piedras todavía no ha vuelto, ojalá se haya caído.

La marea tiene que bajar, aunque ahora llevo ya aquí un rato y no noto que baje, antes en las otras esperas si se notaba enseguida. Baxa la paciencia es una virtud, tranquilo, no desesperes, ya bajará y podrás pasar.

Cada vez llega más gente, muchos se dan la vuelta en cuanto llegan, de los primeros solo quedamos la familia de las niñas poseídas y yo. Lo de la paciencia está muy bien, pero igual estoy haciendo el idiota y la marea no baja más. 

Es ridículo estar aquí, sigue llegando mucha gente y el agua no baja. Voy a aprovechar a volver por donde he venido e ir hacia el otro lado antes de que todos estos piensen lo mismo.

Ahora con la marea baja del todo, veo que el montículo por el que pasé antes lo tiene que pasar todo el mundo, me siento mejor que no he hecho ninguna ilegalidad. Tengo que esperar unos minutos porque sigue llegando gente, y lo de dejar pasar lo llevan mal, así que me quedo esperando yo, como siempre. Una chica de unos 40 años ha subido bien el montículo, pero al bajar se queda un poco a medias. Yo le aconsejo por donde hacerlo más fácil. Lleva una cámara que se mueve de lado a lado y la estoy viendo en el suelo como siga así. La mujer consigue bajar sin problema, me da las gracias y subo yo aparentando ser el puto amo de la escalada. Como me caiga ahora hago el ridículo total. Consigo pasar el obstáculo, y de nuevo en la arena empiezo a recorrer las otra parte de las Catedrales.

Impresionante la zona de arena que ha quedado, exagerado la de metros que ha bajado el agua en poco tiempo. ¿No os habéis preguntado nunca, el agua que estaba aquí, donde ha ido? A veces me siento un poco Homer, pero oye, tengo estos pensamientos.




Llego al final de la playa de las Catedrales, viniendo hasta aquí me he encontrado a varias parejas, que inteligentemente, no se quedaron esperando en el otro extremo de la playa como hice yo esperando a que bajara la marea. Lo bueno es que la mayor concentración de personas está en aquel punto, por aquí se está muy tranquilo.

Veo unas cuevas en una de las rocas, para llegar allí tengo que pasar por encima de unas piedras de esas que tienen ese verde encima que resbala tanto y te asegura ostión. Como no hay nadie a la vista lo voy a intentar, además no parecen tan peligrosas como las que no pude cruzar antes. Por cierto, ¿Qué será del macho alfa que las pasó como si nada? Yo sigo sin ver al helicóptero, así que imagino ha triunfado en su hazaña. La envidia me corroe, otra vez.

Lo mejor de todo, es que la poca gente que había aquí se marcha. Una rubia con cara de guiri y sin mascarilla, que es una de las que sale en ese momento, se pega un pequeño resbalón. Se me queda mirando pensando que me voy a reír, yo ni mu, tengo más papeletas de ostiarme que tu, así que tranquila. Me hace gracia cuando alguien me anima a ir a un sitio a hacer escalada, serán ilusos. Me lo tengo que pensar para pasar por unas putas rocas de una playa, como para ir a hacer escalada. Salgo en el telediario seguro.

Las cuevas son muy estrechas, pero como las otras que he visto hasta ahora, no parecen tener mucho fondo, de todos modos tampoco voy a meterme, estoy saturado ya de cuevas, aunque estas son muy guapas. 



Es hora de darse la vuelta y enfrentarse a los “seguratas” de la playa, además veo que se acerca un grupo, por lo tanto hay que escapar de aquí. Mi animadversión por mis semejantes es digna de estudio pero que bonita es la soledad.

Me pongo a cruzar las rocas, me resbalo y tengo que poner las manos en el suelo para evitar darme una ostia, ha faltado muy poco. Puta confianza, antes pasé con miedo y sin problema, ahora pensé que lo tenía controlado y cataplán, siempre me pasa lo mismo. 

Cuando llego a la altura de la gente que venía hacia aquí, al cruzarme con ellos miro de reojo como hizo la guiri para ver alguna sonrisita en su cara. No muestran ningún gesto, o no se han dado cuenta o disimulan muy bien.

La vuelta hacia la salida de la playa, la hago por la zona alejada de las rocas, como si fuera paseando por una playa normal a la orilla del mar. Los que han llegado más tarde, pero porque lo han hecho bien al reservar y respetar la hora que les han dado, también tienen derecho a disfrutar su recorrido sin que salga yo en sus fotos. Que si a mi me jode que salgan en las mías, entiendo que si salgo yo en las suyas será lo mismo. 


Los accesos a la playa de las Catedrales, que yo sepa son dos, al menos son los que vi ayer. Había pensado que por uno igual podría salir en plan cobardica sin enfrentarme a ellos, pero también está controlado, así que no queda otra que levantar la cabeza y como la Lola de España, a pasar por delante de todos. 

Los “seguratas” son unos críos, casi todo chicas que no deben de tener más de 20 años. Mientras subo las escaleras ellas siguen controlando y dando paso a familias para que bajen a la playa. Paso entre ellos, nadie me dice nada, soy invisible, me encanta.

Una vez, hace ya muchos años estaba de voluntario en la DYA, no se si hay en toda España pero si no sabéis lo que es pues en Google os lo explica, pero vamos es como la CRUZ ROJA pero la DYA en amarillo. El caso es que teníamos muy buen ambiente, amistades que después de 20 años todavía siguen. Bueno pues llegó un voluntario nuevo, y un día hablando todos allí en la sede, coge el tío y da un golpe a una mesa y dice que a ver porqué a él no le mira nadie cuando entra en un bar. Yo de aquella tenía 24 años y mi grupo de amistades más acérrimas tenían 17 años. Buenas chicas si, pero gamberras como ellas solas. Cuando el personaje este soltó la frase yo intenté no reírme, pero era complicado aguantar, ellas que me conocen estaban pendiente de mi, hasta que al final nos empezamos a descojonar todos. Creo que el psicópata aquel no me mato porque había testigos, si no acaba con mi vida. Para calmarle le pregunté que para que quería entrar en un bar y le miraran, si lo mejor en esta vida era pasar desapercibido, y él decía que se sentía ignorado. El caso es que siempre que me encuentro con mis amigas, hoy ellas ya madres, nos contamos batallitas y nos meamos de la risa.

¿Y yo porque os estoy contando esto? Ah si vale, ya me he centrado, he tenido que releer porque se me había ido un poco la perola. A lo que iba, que he salido entre la chicas que controlan y nadie se ha fijado en mi, he pasado desapercibido y me encanta. Y si voy a un bar para que cojones vas a querer que te miren, menudo chalado.

Como se nota que está la bajamar y es el mejor momento para recorrer la playa, es exagerado la de coches y sobre todo furgos y autocaravanas que están llegando al parking. No mola nada como se está poniendo todo. Ni me lo pienso, me sacudo un poco la arena y me voy a ir de aquí. No estoy en mal sitio al ser la esquina, pero por un lado furgos y autocaravanas, y por otro gente paseando, no es mi idea de pasar el día tranquilo. 


Bajo el techo con miedo, a ver si se me va a pillar la lona otra vez. Esta vez cierra perfecto, como lo hace siempre, no se porque ayer le paso eso, caguen la leche, mi pobre rojita ya parcheada dos veces en el mismo sitio.

Llego a Rinlo en apenas unos minutos. La verdad es que tenía unas ganas locas de venir al merendero que vi en este pueblo el otro día cuando pasé por aquí. Que puto paraíso, no hay absolutamente nadie, todo el merendero, todas las vistas, todo el césped, todo es solo para mi. Creo que además de solitario soy egoísta por no compartir nada con nadie. Aparco en la esquina, por supuesto, y a disfrutar de mi vermut en la mesa más cercana a la rojita. Esto amigos, es la felicidad.


Recojo todo, y pienso que la idea del blog es la de informar sobre lugares que me voy encontrando, para animaros a que vengáis vosotros. Así que me doy una vueltecita por el merendero y enseñaros los servicios que hay. Tener tiene hasta fuente, pero ahora mismo está cerrada, no se si por el virus o que, pero se ve bastante nueva, así que igual para cuando vengáis alguno de vosotros ya funciona. Yo de todos modos voy bien cargado de agua así que no hay problema. También hay barbacoas, contenedores y unas maravillosas mesas de piedra con vistas al mar. El parking será para 5 vehículos, pero el lugar es estupendo. Hoy lunes tiene toda la pinta de que voy a estar aquí más solo que la una, de nuevo me entra por el cuerpo la sensación de felicidad al pensarlo.

Pasadas las 14 horas es buena hora de comer. Llevo ya un rato de relax con mi kalimotxo y un poco de lectura, y apetece ya comer algo. Tengo unos muslitos de pollo que están diciéndome cómeme. Dios como amo Mercadona. 





Termino de comer los muslitos y a seguir con la lectura. De vez en cuanto pasa alguna familia andando o en bici por delante del merendero. Unos saludan, otros no, como los pimientos de Padrón.

Aparte de la gente que pasa haciendo alguna rutilla, apenas pasa nadie mas. Por la carretera algún coche de vez en cuando pero tampoco mucho más. Veo a lo lejos como una autocaravana viene por la carretera, va muy despacio. Se para pero no se baja nadie. ¿Estarán buscando algo? Porque ayer cuando pasé por ahí no recuerdo que hubiera donde meterse, deben estar en la carretera. La autocaravana se vuelve a poner en marcha. ¿No estarán buscando el acceso no?. Me caguen la mar, el techo elevable de la rojita lo van a ver desde la carretera, noooooo. Como tenia claro que me iba a quedar aquí he dejado todo preparado, pero claro igual desde la carretera se ve el techo y se animan a venir. Baxa pero que pardillo has sido.

La autocaravana continua hacia mi pero al llegar al acceso pasa de largo, joder que susto, eso ha estado cerca. Igual sería mejor bajar el techo de la furgo. Oigo otra vez un motor, la autocaravana ha debido de ir mas adelante a dar la vuelta y así acceder mejor, vienen para aquí. 

Vale que el parking es pequeño, pero no aparcan en la otra esquina, que va, al lado de la rojita. Cuando abren la puerta se descubre el peor de mis sueños, familia con hijos y perro desenfrenado. He pasado del cielo al infierno. Señor Dios, porque me haces estas cosas.

Ya me los imagino venir hacia a mi a esos demonios llamados niños, el perro meara en la rojita y luego cagará al lado de donde estoy yo. Y los dueños mirarán sonriendo como, son niños, es un perro, hay que disfrutar de la vida. Me cago en to lo que se menea. Dentro de todo lo malo, no ocurre nada de eso, cierran la autocaravana y se marchan por el camino a dar una vuelta. Vuelvo a estar solo, pero ya no soy feliz, se lo que me espera luego.

Intento concentrarme de nuevo en la lectura, apenas han pasado unos minutos y otro vehículo se acerca, esta vez es una Marco Polo. Voy a llorar, ahora ya las furgos que pasen, ven a la rojita, a la autocaravana, y a la Marco Polo, y piensan que es un puto furgoperfecto. Esta vez asumo todas las culpas, la he cagado pero bien. Los de la Marco Polo son una pareja sin hijos, no salen de la furgo y no levantan el techo. No se si les ha dado un calentón y están echando un polvete rápido, o quizás son más listos que yo y no lo levantan para no llamar la atención y no venga más gente. Ya es tarde, yo lo hice y se jodió el sitio idílico. 


Se acercan varias parejas con sus hijos, y van directos a las rocas, se oyen gritos y risas, ¿Qué estarán viendo tan emocionante?, me acerco al lavadero que esta al borde del mar, hay unas olas enormes. Vuelvo a la rojita a por la cámara a ver si pillo alguna foto chula. Aquí justo donde estoy, golpean algunas olas por encima de una cueva, molaría pillar alguna justo rompiendo. 

El que la sigue la consigue, no es para premio pero me gusta como ha quedado, lógicamente antes hice tropecientas mil, todas borradas, solo me quedo con esta. Es lo que tenemos los profesionales de la fotografía. Estoy siendo irónico. Las parejas se han ido, apenas han estado unos minutos, yo sigo disfrutando de las vistas, es una pasada la fuerza con la que rompen las olas. Si no fuera por esta peña que ha venido, joder que bien estaría. Si vale, no han hecho nada para molestarme, si el problema lo tengo yo, solo la presencia de humanos a pocos metros ya me molesta.


No puede ser lo que que estoy viendo, he oído un ruido, me he dado la vuelta y una autocaravana aparece por el acceso. Esto es una puta pesadilla, he pasado de estar solo a parecer esto un puto camping. ¿Por qué dios? ¿Qué hice yo para merecer esto? ¿Por que la felicidad que me has dado me la has quitado tan pronto?, es muy cruel. 

Los de la autocaravana son una pareja joven, también con perro. Salen de la autocaravana y se acercan a mirar las olas. Yo me vuelvo para la rojita, estoy ya no amargado, estoy que me sale el humo por la cabeza. Lo mejor de todo es que ya no puede aparcar nadie más, esta el parking a tope. 


Llega la pareja de la primera autocaravana, se suben a su vehículo y se marchan, ¿como? Ostras que sorpresa, esto si que no me lo esperaba yo. Son los que más peligro tenían de dar por culo con niños y el perro, a los de la Marco Polo ni se les ve, y los últimos que llegaron están demasiado enamorados para molestar al resto, solo existen el uno para el otro, ya se les pasará con la edad.

De la Marco Polo se baja la mujer y se acerca a la rojita, no se que habrán hecho tanto tiempo dentro con el techo bajado. Se pone a mirar la rojita, sobretodo la cuerda que le tengo puesta tensando la lona del techo para que ayude a cerrar cuando hace viento. Imagino que no sabe que estoy dentro, porque está prácticamente tocando mi furgo. Se vuelve a su camper, arrancan y se van. ¿Eing? Venga ya, ¿En serio? No puedo evitar sonreír, solo falta que los enamorados también se marchen, aunque ya seria mucha casualidad. Ahora no están, se han ido a dar un paseo y ya son casi las 19 horas. 

Al rato los veo aparecer por el camino y se suben a su autocaravana, abren una botella de vino, huele a sexo desde aquí. Vinito, cena, y a darle en la autocaravana. Yo con esa edad las autocaravanas solo las veía por la televisión.

Me pongo la tele, no es plan de ver como otros le dan a la matraca. Oigo como  arrancan la autocaravana, que poco romanticismo con el motor en marcha. Veo moverse el vehículo, y no por sexo, que va, se están yendo. No, no puede ser, también se marchan. Venga yaaaaa, pero es que venga yaaaaa. Pero que ser malvado ha tramado esto, amargarme así para que luego se marchen todos. Mientras salen por el camino pienso en la botella de vino, espero que la hayan guardado, o al menos que le pusieran el tapón.

Vuelvo a estar solo, eso si que mola, nadie, me encanta. De vez en cuando pasa alguno del pueblo paseando a los perros, pero esos no me molestan. Bueno no me molesta hasta que se acercan dos mujeres jóvenes que también están paseando a los perros, uno de ellos justo cuando llega donde la rojita, pilla posición y echa un tordo con forma de alita que se habrá comido hoy. ¿Pensáis que se ha dignado a recogerla? Nooooo, seguro que ella cree que es abono para el campo y el que yo esté en la furgo al lado no es problema, total los furgoneteros somos guarros que no nos duchamos y vivimos rodeados de mierda. Me quedo mirándola pero no le digo nada. Primero porque tiene toda la pinta de que me mandaría a la mierda, y segundo, que a una mujer hoy en día no se le puede decir nada porque acabas durmiendo en el cuartel.

Tarde de perros, ahora se acerca otra chica, esta más joven, va con tres enormes perros sueltos, un pitbul, un labrador, y otro que no se que raza es, pero muy grande. El pitbul veo que viene corriendo hacia mi como loco, no me asusta porque no se le ve peligroso, pero que viene hacia mi está claro. Los otros dos corren tras él, los tres los veo venir sin animo de frenar. El pitbul intenta meterse en la rojita, yo le agarro y no le dejo, se me pone a jugar y lógicamente a ensuciarme. Menos mal que todavía no me he duchado y la ropa la tengo sucia de la ruta de la mañana. Los otros dos perros se quedan mirando la escena. Llega la chica apurada y me dice perdón, yo le digo que no pasa nada. Aunque por dentro pienso que debería llevarlos atados y así se ahorraría ese sofoco. Aunque tampoco la veo tan sofocada, seguro que a la vuelta los vuelve a traer sueltos y se repite la escena, eso me demostrará que su sofoco es fingido.

La puerta del copiloto la tengo abierta, el pitbul como ve que no puede entrar se rinde y sale corriendo hacia su dueña, con la mala suerte de que se mete por debajo de la puerta y se da una ostia con la punta de la puerta que el perro se estremece. Menos mal, que la puerta no se ha movido, porque si se llega a abrir más se habría golpeado con un banco de cemento que había al lado y me habría hecho un buen arañazo. Le digo a la chica que se ha tenido que hacer daño. Cuando cree que no la veo, se pone a mirar al perro por si tiene algo, pedazo ostión se ha dado el pobre.

Tengo que ducharme pero voy a esperar a que la tía esta vuelva a pasar. No pasa mucho tiempo cuando oigo ruidos, ahí vienen los tres otra vez, no los veo porque vienen por el otro lado, pero el sonido es el mismo. ¿Vosotros pensáis que los lleva atados? Que va, si al gilipollas este de la furgoneta no le importa. Si te quejas eres malo, y si no eres idiota. 

Empieza a oscurecer, ya hace rato que no pasa nadie, solo oigo el sonido de las olas. Me acerco a verlas un rato y vuelvo para la furgo. Una ducha y a descansar dentro viendo la tele, aunque enseguida me meto en la cama que estoy cansado. Es meterme en la cama y empezar a oír gente pasar. En este pueblo por la tarde se pasean a los perros, y de noche sale el resto del pueblo, joder que peña. 




Martes 30 de Marzo del 2021

Esta noche ni calefacción ni nada, vaya temperatura más buena ha hecho. Ya ayer al acostarme se notaba que el tiempo había cambiado y no había refrescado tanto como las noches anteriores. Ahora para ver el amanecer no hace falta que me ponga la sudadera, con el simple pijama se puede estar bien. Y eso hago, me cojo la cámara y sin vestirme me acerco al borde del acantilado para disfrutar de la espectacular salida del sol. Que os voy a decir que no os haya dicho ya en otros amaneceres. Es maravilloso. 


Hoy toca la ruta hasta la playa de las Catedrales andando, para así finalizar el tramo Ribadeo – Playa de las Catedrales. Dejo la rojita y marcho por el sendero por el que ayer vinieron las por culeras de los perros. Una señal indica que tengo 6 km hasta allí, así que ruta corta, solo 12 km.

El día no sabe si despejarse o nublarse más, está un poco tonto. Lo importante es que ni va a llover ni hace frío, así que vamos a disfrutar de lo que hay, que es bastante.

Nada más salir de Rinlo me encuentro con esta escena de cuento de hadas, el otro día cuando llegue hasta aquí no me di cuenta. Solo falta un castillo medieval para que sea de cuento total.


Sigo el sendero dejando atrás Rinlo. Dando los primeros pasos de este tramo, me da la sensación de que es una zona más aburrida que el tramo que recorrí el sábado. Puede ser también que al llevar ya varios días por la zona y esté el día nublado, no me deslumbre tanto como lo hizo el otro día.

Apenas llevo unos minutos andando y llego a unas ruinas. Al lado de las ruinas hay una especie de piscina artificial que no tengo ni idea para que servirá, imagino que sería para pescar o mantenerlo ahí, no se. Igual estoy diciendo una burrada, si alguien sabe lo que es que me lo diga.

El sendero por el que voy, llega un momento que desaparece. Confirmado, este tramo está peor señalizado y tiene toda la pinta de ser menos frecuentado. Hay unos pivotes de cemento que igual aunque el sendero como tal no existe, los pivotes sirven de guía. 





El sendero vuelve a aparecer, que bien, he conseguido no perderme. Aunque teniendo en cuenta que a un lado tengo el mar, habría sido más fácil despeñarme por el acantilado, que perderme.

El sendero se empieza a alejar de la costa y me lleva a una antigua piscifactoría en ruinas. Una valla impide el paso, ya sabéis que todo en ruinas me encanta, pero una piscifactoría no le veo mucho encanto, así que ni intento meterme y sigo el sendero que tras pasar la piscifactoría me lleva de nuevo al borde del acantilado.

Durante unos minutos voy paseando sin pena ni gloria, el día está feo, eso no resta belleza a los rincones que estoy viendo, pero bueno, no lo estoy gozando tanto como el sábado. Incluso me llama más la atención la forma en la que se está abriendo el cielo, da la sensación que voy a tener una aparición en cualquier momento.




Si las vacas se pegan buena vida, todo el día tumbadas a la bartola comiendo, durmiendo y cagando donde les pilla, si encima tienes unas bonitas vistas al mar, pues que queréis que os diga, vidorra total. Lo que no se es porqué las vacas dejan de hacer lo que estén haciendo cuando alguien pasa al lado. Quizás la persona que os conté que se enfadaba que al entrar a un bar nadie le miraba, sería bueno que se paseara entre vacas, siempre te van a mirar.

Dejo las vacas atrás y también mis deseos de vivir como ellas, ahora quiero vivir como los de las casas por las que estoy pasando. Joder, vivir aquí tiene que ser la leche, estas vistas, este olor a mar, esa cuenta corriente. Solo le faltan ruedas para ser perfecta, porque si tienes ruedas puedes cambiar de vistas cada mañana. Pero vamos, estas aunque no tengan ruedas, como campo base para vivir, ya firmaba yo.





El paseo entre estas casas de “pobres” me lleva a la carretera que va hacia Las Catedrales. Paso al lado de un chiringuito que el domingo por la tarde cuando pasé con la rojita, estaba petado de coches y gente. Ahora solo hay dos hombre y una chica que están preparando todo para cuando llegue la gente.

No me importa ir por la carretera, todavía es pronto y no pasan apenas coches, de todos modos me alegro cuando de la carretera sale un sendero que pasa por una bonita área recreativa, y que según  una señal lleva también hacia la playa de las Catedrales. Lógicamente ni me lo pienso, mejor por aquí que por asfalto.

Desde el sendero por el que voy llego a una playa que podría competir claramente en belleza con la playa de las Catedrales, su nombre, Playa de Illa. Preciosa. Encima la marea está baja, no hay nadie, se me iluminan los ojos. Evidentemente voy a bajar, ya lo creo que voy a bajar a verla.

Son bonitas hasta las escaleras que bajan a la playa. De verdad, no creo que la gente que tiene su casa aquí valore donde vive, impresionante lo bonito que es todo esto. La ruta hasta aquí no es que haya sido gran cosa, pero solo por este lugar, ya merece la pena. 



Nada más pisar la arena, veo a un grupo de gaviotas que están tranquilamente en la playa. Las rocas bonitas están a la derecha, las gaviotas a la izquierda. Si lo reconozco. Voy corriendo hacia las gaviotas para hacerlas volar a todas a la vez, ¿soy un inmaduro? pues si, ¿y que pasa? estaba solo y no me veía nadie.

Después de tocar las narices a las pobres gaviotas, me dirijo perderme entre las rocas de esta maravillosa playa. No puedo evitar dejar de pensar en como nos manejan, les da por publicitar una cosa, en este caso la playa de las Catedrales, y todo el turismo allí, pero al lado está este impresionante lugar que seguro que solo visitan y valoran los que conozcan la zona. No creo que tenga nada que envidiar la playa de Illa a la de las Catedrales.

Miro en el móvil la bajada de mareas para confirmar que no me voy a quedar aislado. Ya sabéis que no puedo evitar meterme en todos los rincones, pero siempre con cabeza, bueno siempre no, pero hoy voy a intentar ser responsable.

Algunos lugares de esta playa son tan bonitos que no parecen reales, tengo la sensación de estar en una isla sin nadie. Joder, no veo plan mejor.






Después de recorrer toda la zona, voy paseando por la playa donde estaban las gaviotas. Veo unas escaleras que no son por las que accedí. Estas escaleras suben mucha pendiente en poca distancia, casi hace faltan unos piolets para subir por ellas. 

Al llegar arriba hay una pareja disfrutando de las vistas de la playa. Al ir a pasar entre ellos les voy a decir que se animen a bajar que es precioso, pero como ni me miran a la cara pues nada. Que se jodan.

De nuevo voy paseando por asfalto, ahora si que si, desde aquí directo a mi destino. Tengo la suerte de que sigue sin haber mucho movimiento de coches, por lo que el paseo es agradable.

En una curva encuentro una preciosa área recreativa. La que vi antes era muy bonita pero esta ya me parece la leche con las vistas que tiene. Lástima que esté nublado, con el cielo azul desde aquí será la bomba. 

Hay una señal que indica que por aquí también se llega a la playa, así que por supuesto que abandono la carretera y voy por aquí. El sendero dura muy poco, ya lo imaginaba porque estaba ya desde la playa de Illa muy cerca de las Catedrales. 

Ya a lo lejos veo la cantidad de autocaravanas que hay en el parking, imagino que ayer todos los que se marcharon de Rinlo habrán venido a dormir aquí. Según me voy acercando ya reconozco a la autocaravana de los enamorados, la otra más viejita y la Marco Polo no están.

A pesar de lo baja que está la marea, todavía el parking está tranquilo, las autocaravanas tienen pinta de estar las que han dormido aquí. Todavía no llegan a pesar de que ahora podrían ver la playa con la marea baja y toda para ellos. 




Ha sido bonito recorrer este tramo de la costa de Lugo, Ribadeo – Playa de las Catedrales. Ya estoy pensando en el siguiente tramo, lo que no se es cuando será, y menos ahora con las movidas de las restricciones. Pero ya os digo que iré recorriendo toda la costa, la de Lugo y todas las que pueda.

Ahora ya solo me queda volver a la rojita, sin prisa, porque se que cuando llegue marcho para casa, a mi otra casa, la de Coruña, por lo que no se acaban las vacaciones, pero sin el dormir en la rojita por lo que ya no es lo mismo. 

Al llegar a Rinlo entro al pueblo por una carretera por la que no había pasado hasta ahora, y donde hay un pequeño camping. Esta completamente vacío, aunque hay un coche aparcado y alguien en recepción. No se si está vacío por el covid o porque te cobran un pastizal por dormir en tu vehículo, pero da penita verlo así.

Llego a la rojita justo a las 12 del medio día, no se que pasa en este viaje que siempre llego a las 12. Bajo el techo de la rojita ya que el cielo tiene pinta de que puede llover en cualquier momento, la temperatura es buena pero el cielo está muy feo.

Descanso un ratillo tomándome unas birras mientras poco a poco me pongo a preparar la comida y así alargar un poco la vida en la rojita. 


Recojo todo en la rojita, toca vaciarla completamente para limpiarla en Coruña bien por dentro y por fuera. Meto las sábanas en la bolsa de ropa sucia, así en cuanto llegue lavar toda la ropa y dejar la rojita nueva. Nunca ha sido de limpiar mis vehículos, pero la rojita no es un vehículo, es mi casita con ruedas y hay que tenerla limpita. Pero bueno, tengo casi una semana para todo esto, ahora poco a poco para casa.

Para ver más fotos:

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FIN


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